Mi opinión es que cada cosa debe valer lo que debe valer... ya se que la

Mi opinión es que cada cosa debe valer lo que debe valer...
ya se que la afirmación no es de una claridad brutal, pero
es tan simple como eso.
Hay vinos que deben valer lo que deben valer, porque el coste
de producción, el resultado final, la exclusividad, así lo amparan, como
en todos y demás sectores del mercado.
Hay vinos que están carísimos, porque no hay nada que vale su precio.
Hay vinos que son una joya barata. (Pocos,no nos engañemos, las
obras de caridad se hacen en los platillos de la iglesia, y en
la maratón TV3, ningún empresario,sino es por estrategia comercial
muy estudiada o por falta de facturación, vende por debajo del
valor medio de mercado...ningún empresario es amigo de perder
un duro, mal empresario sería...!!!).
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Hay vinos que solo deberían beberse en días de celebración, porque
por si solos constituyen una celebración, y hay correctos vinos de a diario capaces de ennoblecer una buena comida.
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Estoy a favor de que haya enólogos y bodegueros que concentran sus
fuerzas en ofrecer vinos de emoción, no todo el mundo debe deciarse a hacer vinos baratos o buena relación calidad precio, además sino,
muchas tierras de cultivo de la vid tendrían que abandonarse, porque
no permiten mantener altos rendimientos y mecanización globalizada, que facilite altas producciones, y debo recordar que viñas viejas,
cultivos biodinámicos o al menos ecológicos, no regadio, laderas,
viticultores aventajados, buenas maderas, (Ay el precio de los
toneles...ay!!!),maderas semi nuevas o nuevas, buenos controles
por buenos enólogos en bodega etc..., no son suceptibles de vinos
a ";duro";, para milagros a Lourdes.