Pues, la verdad, en mi modesta opinión, yo creo que nada. Hay que tener en

Pues, la verdad, en mi modesta opinión, yo creo que nada.

Hay que tener en cuenta que las rocas ígneas, cristalinas, como el granito, son las que presentan una porosidad menor, por lo que la microoxigenación del vino en el periodo de crianza debe ser muy pequeña, casi inexistente, al contrario de lo que sucede en una ánfora de barro, por ejemplo. Un granito puede presentar una porosidad de un 1%, mientras que una arcilla oscila entre un 40-60%.

También dudo que durante el periodo de tiempo que dura la crianza, el granito pueda trasladar notas minerales al vino. Otra cosa es que la forma del recipiente favorezca un movimiento natural de las lías, sin necesidad de medios mecánicos (batonnage), pero por la forma, no por la naturaleza del material.

En cualquier caso, no soy enólogo ni he estado implicado en el proyecto, así que respeto totalmente el trabajo que están haciendo y aplaudo que se intenten cosas nuevas, en este caso, basadas en prácticas antiguas, cuando la gente echaba mano de lo que tenía más próximo, en gran parte de Galicia granito.