La restauración tiene un chollo con los verdejos: fáciles de beber, baratos, buena comercialización, bien aceptados en el restaurante... Todo ello hace que haya un tsunami de verdejos. Aquí hay uno que dice algo más.
A la vista amarillo pálido, limpio, brillante. En aromas además de los esperados cítricos y manzana verde, tiene también fruta tropical madura que acaba el predominio de los anteriores. En boca persiste lo llegado en aromas siendo delicado, con buen equilibrio de la acidez y con una persistencia que merece también destacarse dentro de su gama.
Un muy buen verdejo que mantiene el precio.