Corcho no muy largo pero perfecto, apenas bañado en vino interiormente aunque la parte interior denotaba un rojo picota concentrado.

Visual: rojo cereza-cobrizo de capa media, ribete transparente-atejado, casi limpio aunque con algunas pequeñas partículas visibles en el ribete (lo cual aconsejaría decantación previa). Brillante y con excelente lágrima muy abundante.

Nariz: muy buena desde el inicio. A copa parada de buena intensidad, fruta en licor muy madura, especiados, regaliz, vainilla, coco, pimienta negra, clavo y balsámicos. A copa movida aparece mucho más: más especias, cueros, maderas, más mentolados, cacao y chocolate amargo y sutil aroma animal muy muy leve. Eso sí: todo excelentemente integrado y con una elegancia fenomenal.

Boca: entrada sedosa, suave pero muy seria, poderosa, estructurado, con buen volumen y con todavía fruta licorosa y ligerísimamente compotada. Tanino aún presente, muy pulido, dulce y agradable pero existe y se percibe en encías (sorprendente después de 12 años). Paso por boca sabroso, con retrogusto y final a chocolates, cacaos y sutiles torrefactos. Final bastante largo, voluminoso y rico, con retrogusto y retronasal muy compleja a fruta en licor, cacao, maderas, toques animales, especiados y mentolados-balsámicos.

Vino del que me regalaron varias botellas pero del que, consultando su precio, su RCP es bastante buena.

Un Ribera Reserva de 10 años. Bien la cápsula, algo de moho en el tapón que he limpiado con un trapo húmedo. Corcho normal (no muy largo) pero en buen estado.

Visual: rojo picota amarronado, ribete atejado, limpio, brillante, muy buena lágrima. Capa media-alta. Se observa un vino bastante evolucionado pero de capa media-alta (a diferencia de muchos Rioja viejos que suelen ser de capa media-baja).

Nariz: no abunda la fruta aunque ésta es negra y muy en licor, abundan los terciarios, ahumados, cedro, desván, maderas y muebles viejos, cueros, piel de animal y cárnicos. Abundantes especias como la pimienta negra, el clavo y torrefactos/tostados así como muy profundos balsámicos/mentolados.

Boca: muy suave y sedoso en la entrada, muy fácil de beber, de cuerpo medio, taninos dulces y muy pulidos, pasa como un bálsamo. Poco frutal pero muy estructurado. Buena acidez todavía. El final es medio-largo y deja un muy buen regusto y retronasal a torrefactos, café, tostados, toffee y balsámicos.

La visual no destaca en exceso y la nariz, siendo mejor, tampoco augura un gran vino. Sin embargo, la boca es fabulosa y me ha encantado. Denota una fenomenal evolución de este vino al cual, a pesar de su edad, todavía es posible disfrutarlo en los próximos 2-3 años.

La RCP es muy buena.