Rosado para impresionar...
Prado Rey Rosado es un vino rosado un tanto peculiar. Está elaborado con las variedades de Tempranillo y Merlot, a partes iguales, y ha realizado la fermentación en conos de madera francesa de 21.000 litros y en barricas de roble europeo del Cáucaso, en donde ha tenido una corta crianza de unos tres meses.
Vista: De color rosa fresa con irisaciones cobrizas; limpio, muy brillante, muy glicérico, con una densa lágrima que se desprende con lentitud por la copa.
Nariz: Tiene buena intensidad, limpio, muy afrutado, con el toque de la crianza casi imperceptible, con el recuerdo de frutas como la cereza y la fresa...o a las que acompañan un toque de lías (las levaduras que acompañaron su crianza), una ligera nota ahumada, vainillas y regaliz rojo; todo ello proporcionando un aroma muy grato y de cierta golosidad.
Boca: Gosolinas de Vino buen comienzo, es amplio, intenso, sabroso, denso, muy afrutado, goloso, ligeramente cálido, con una buena estructura, la acidez muy bien ajustada y un final que es persistente y afrutado.

Una de las Bodegas más equilibradas y sostenibles de la Ribera del Duero. Una apuesta segura por calidad y precio en cada añada.

En esta ocasión se presenta con un Rosado fermentado en barrica, si bien es verdad que les queda recorrido para perfeccionar más esta nueva andanza, en sus inicios apunta buenas maneras con este rosado cremoso en boca con buen corazón de frutas rojas, rica estructura y puntas que nos desvelan su acidez.

Hablando de armonía: Ligado con un Risotto con Colmenilla y foei, un plato enorme en contundencia que ha funcionado muy bien con este rosado gracias a su bravío y las notas silvestres de sus fruta roja.