- Qu'est-ce qu'il sent bon ! Tout le monde acquiesce de la tête : mais que sent-il ? - La fleur de citronnier...le zeste de mandarine... les graines de coriandre en poudre. Pourquoi pas ? En bouche, on remarque le sucre résiduel - 17 g/l. - peu de chose mais, par rapport à un riesling sec, ce n'est pas rien mais " feinherb " signifie demi-sec. Le vin est particulièrement léger - 11,5° - dense, tendu, extrêmement élégant mais il manque de longueur : personne ne peut être plus fort que son point faible. Il évoque la mousse de citron vert & la gelée royale. En fin de bouche, apparaissent des notes salines d'une grande délicatesse : c'est un blanc qui donne envie de danser le menuet.
- ¡ Qué bien huele ! Todo el mundo asienta con la cabeza : pero ¿ a qué huele ? - A flor de limonero ... a cáscara de mandarina y ... a granos de cilantro en polvo. ¿ Por qué no ? En boca se nota el azúcar residual - 17 g/l. - poca cosa pero, respecto a un riesling seco, no es nada, pero " feinherb " significa semiseco. El vino se presenta ligerísimo - 11°5 - denso, tenso, sumamente elegante pero carece de longitud : nadie puede ser más fuerte que su punto débil. Recuerda a la mousse de lima y a la jalea real : aparecen en el final de boca delicadísimas notas salinas. Es un blanco que da ganas de bailar el minué. ( PVP : 10,65 € )
Uno de los blancos que acompañaban a la multitud de tintos el Sábado pasado en la quedada veremera en casa de un servidor, fue este riesling de Barzen, el cual, tanto Carles como Oscar, me recomendaron como una buena opción de blanco para comenzar una mañana bien agitada en el tema enológico.
Cabe decir que después de probar el Trocken de la misma bodega (más seco en el paladar), tenía ciertas reticencias para degustar este Feinherb. Y creo que, afortunadamente, me equivoqué.
Viste un amarillo de buen brillo en la copa.
En la nariz, recordando ese antes mencionado Trocken, me resulta más atractivo. Tal vez éste está ahora mismo en un gran momento y posiblemente lo haya disfrutado mejor así. Es interesante decubrir esa fusión entre lo mineral, la fruta blanca (un atisbo muy bueno de pera blanca), alguna nota cítrica y dejes florales de fondo.
En boca demuestra ahora mismo, una acidez a prueba de bombas. Trago larguísimo, seductor, sedoso a la par que dulce (sin pasarse) y un final que no deja otra impresión más que la de volver a llenar la copa y no parar hasta vaciar la botella. Por cierto, se acabó muy deprisa. Es lo que tiene estos vinos.
Gracias amigos, por la recomendación.