Buen vino, barato y fácil de beber

Un clásico riojano muy económico (por 16 euros se encuentran 4 botellas en varios centros comerciales, a 4 euros/botella).

Visual: rojo intenso cereza oscuro, ribete neutro, ni cardenalicio ni atejado, en su punto aunque un poquito más evolucionado que otra botella de este mismo vino que descorché hace 3 meses. Lágrima fina y densa, no demasiado abundante.

Nariz: intenso, frutal, madera de buena calidad que no empaña toques a ciruelas y moras, regaliz, especiados y vainilla. Algo menos balsámico en nariz que otros vinos riojanos de su categoría. El alcohol está poco presente si el servicio se realiza a unos 16 grados.

Boca: entrada suave, limpia, redonda y franca. Agradable al paladar, no raspa y no tiene aristas. Taninos perfectamente domados. Bastante fruta todavía con un fondo de madera, un toque de balsámicos, regaliz, vainilla y cacao. Paso por boca fácil, retrogusto persistente y largo, retronasal algo más corta.

Un vino perfecto en RCP, por 4-5 euros que cuesta la botella es complicado obtener mejores resultados cuando de clásicos se trata.

En particular, Ederra, junto a Puerta Vieja Crianza, es de los crianzas clásicos de roble americano preferidos por mí.

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