Un alsaciano muy alemán

Dorado pálido brillante.
Nariz de media intensidad, todavía muy primaria, Serio y austero, nos muestra unos tenues atisbos florales, toques de fruta blanca fresca, manzana, albaricoque, recuerdos de cítricos frescos y un mínimo fondo mineral. Mostrando el carácter varietal, aunque todavía por desarrollarse en botella.
En boca sigue mostrando esa austeridad marca de la casa. Muy seco, marcado con una fina acidez, tiene un elegante final que deja unas marcadas notas de pomelo y minerales. Con persistencia y amplitud. Muy elegante, redondo, con mucha viveza que le otorga su potente acidez. Para dejar descansar un tiempo.
Este básico de Trimbach nos enseña el estilo de esta fantástica bodega, un grande alsaciano con toques muy alemanes. Un básico a la altura de sus homólogos teutones. Excelente vino por 13 euros. Todavía joven, mejor guardar un tiempo tras el que seguro, ganará enteros. Muy rico.