En magnífica forma.

Han transcurrido 13 meses desde la última botella bebida de este vino y continua en perfecta forma. Los meses transcurridos no le han afectado en nada salvo en el corcho que empieza notar los años . Recomiendo descorcharlo con un sacacorchos de láminas, también abrirlo y jarrearlo un par de horas antes de su consumo. Está un poco cerrado.

         A la vista un color rojo picota de capa media alta. Limpio y brillante. Ribete granatoso y con incipientes y leves notas teja. Abundante lágrima que se desliza abundante y lenta por el cáliz de la copa.

        En nariz abundantes y frescas frutas negras y rojas del bosque en sazón. Madera de su crianza en segundo término.

        En boca es donde mejor se expresa. Es muy elegante, sedoso,  frutal, mineral, con los taninos domados, con volumen y carnosidad.  Te llena plena y satisfactoriamente la boca. Con una expresiva acidez que invita a beber y que le va a otorgar más años de vida. Gratísimo y elegantísimo paso de boca. Es un vino muy largo. Me da una permanencia de 3,45 minutos.

     ¡Ah! y las notas de pimiento verde sin aparecer. Cuando se elabora bien la cabernet suvignon pasan estas cosas.