Amarillo dorado limpio y brillante con reflejos verdosos, burbuja media y

Amarillo dorado limpio y brillante con reflejos verdosos, burbuja media y abundante.

Nariz de intensidad media donde priman la finura y la elegancia sobre la potencia. Finos toques florales, violetas, jazmín, bollería recién horneada, serie de frutos secos, frutas maduras, manzana asada, ligeros cítricos. Pero lo que más destaca es esa sublime mineralidad, esos recuerdos de tierra mojada, ese bouquet que sólo desarrollan los terruños excepcionales como este. Fantástico.

En boca es un vino vivo, nervioso, del cual quedan dos principales cualidades: la acidez y la cremosidad. El paso es placentero y el final es muy largo y persistente y deja recuerdos de fruta amarga y minerales. Fino, fresco, con una excelente integración carbónica y esa elegancia y finura que hacen de este vino una caricia.

Este champagne sólo se define con una palabra: terroir. Pura expresión de la chardonnay en uno de sus mejores entornos: la Côte de Blancs. Cuvée puntera de Lenoble, una interesante maison con muy buenos productos. El precio, unos 55 euros, adecuado para su enorme calidad.

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