De color rubí rojizo de capa media, limpio, brillante, muy estable, sin asomo de precipitados. Reflejos cobrizos y ambarinos, borde anaranjado.
Muy intenso, complejo. Tiene todo lo que se le puede pedir a un buen Ardanza "joven": tabaco de pipa, ebanistería, fruta roja en confitura, escarchados, pieles de naranja y un fondo de cacao en polvo, café aromático, ligeramente tostado. Abierto, expresivo, perfilado, sin haber comenzado a dar ni siquiera los primeros síntomas de reducción. Estamos ante un vino que promete tener un largo recorrido en botella.
Vigoroso, fresco, sabroso, lleno de fruta roja madura y unos taninos grasos, redondos. Todo él es equilibrio y empuje. Mantiene una intensa acidez y un nervio poco habitual. Un muy buen Ardanza que aún tiene que ir a más, a mucho más. Estos vinos del 96 no paran de deparar alegrías y siguen habituándose poco a poco a la botella. Nada tienen que envidiar a las célebres cosechas de 94 y 95. Hay que darle tiempo para que vaya creciendo con los años. En la línea de los mejores clásicos de la bodega. Un hallazgo!!!
Más información del vino: http://vinosclasicos.blogspot.com.es/2013/07/vina-ardanza-1996-reserva.html