Ayer decidí ver como había evolucionado este vino, ya que lo tenia en la

Ayer decidí ver como había evolucionado este vino, ya que lo tenia en la bodega desde hacia 3 años, sus hermanas ya cayeron en ocasiones anteriores. En la fase visual muestra la evolución de haber pasado de ese picota de capa alta a un color tirando más a rubí pero sin ningún signo de decrepitud como les pasa alguno vinos de este estilo. En nariz, es fantástico ya que ha ganado bastante en complejidad ya no aparecen esos aromas primarios, y predominan lo aromas secundarios y terciarios. Aparece la vainilla, tostados y bombones de licor, también un marcado aroma mineral. En boca es una maravilla, esos 14,5º se han integrado perfectamente y el vino tiene una muestra esa explosión alcohólica que mostraba años atrás, que obligaba a decantarlo antes. Tiene una estructura excelente, paso largo y suave y en el retronasal aparecen marcados tostados. Le ha venido muy bien esta fase reductiva, como le pasa a sus primos de Priorat ha valido la pena la guarda. Las anteriores botellas las decante, esta no ya que tenia algo de poso totalmente razonable. Volveré a comprar otra caja y continuar experimentando la evolución de este vino que me parece de lo mejor del Emporda.