Bombazo o puñetazo , hablamos de lo mismo. Una increíble expresión frutal de la monastrell que parece mejorar cada año. Este 18, es de los mejores que he probado. En su estilo frutal deslumbra. Fruta negra compotada y madera cremosa. Concentardo, denso en en boca, expansivo, maduro. Una mermelada de vino , dirán algunos, pero qué rico.
Estamos ante uno de esos vinos "mediáticos". He leído maravillas y también malas críticas sobre estos vinos de Juan Gil. Como siempre, lo mejor es probarlo uno mismo y emitir su propio veredicto. Esta valoración la efectuamos al tercer día de abierta la botella (conservada con tapón de vacío), pues ese 15% de alcohol nos imponía un poco de respeto y pensamos que unos días abierta le irían bien. Además la atemperamos un poco hasta que alcanzó los 15°C para su valoración.
VISUAL: Impresionante color rojo picota con el ribete violáceo, muy brillante, bastante opaco y de capa muy alta. Presenta lágrimas escasas, de grosor medio y transparentes (92).
OLFATIVA: Los primeros aromas que encontramos son de fruta muy fresca, huele a frambuesa pero intensamente. Al agitar la copa aparecen notas florales como de rosas rojas así como un toque vegetal de pimientos, como si "cabernetease" pese a ser un monovarietal de monastrell. También asoman especiados de pimienta negra y clavo. Al final hay apuntes licorosos de duelas envinadas. De intensidad media (quizás por la temperatura) y notable complejidad (87).
GUSTATIVA: Aquí nos encontramos con un "puñetazo" de fruta, espectacular, como mascar una granada recién abierta o unas fresitas acabadas de coger. De altísima acidez y con los taninos algo verdes, un tanto secantes todavía en su paso por boca. Los aromas retronasales de nuevo fruta roja y más fruta. En el post-gusto qué encontramos?... pues más fruta, apabullante, frambuesa, ciruelas rojas, fresas, granada... fruta a la enésima potencia. La persistencia es alta, nos sale de unos tres minutos y quince segundos. Curiosa experiencia ésta aunque debo decir que me parece un poco excesivo en su frutosidad y máxime con lo que a mí me gusta que la madera adquiera un poco de protagonismo (no la encontramos por ninguna parte). En fin, no es mi vino predilecto pero debo reconocer que impresiona tanta fruta en un vino, así que lo dejaremos en notable alto (88).
La RCP me parece muy buena pues nos costó 7.90 euros la botella.
MARIDAJE: Nos lo tomamos el primer día con nuestro surtido de jamón y embutidos ibéricos, el segundo con un pollito frito a la salvia y nos lo terminamos con una ensaladita de apio, rabanitos, queso fresco, frutos secos y varias pimientas. Acertamos plenamente en el maridaje con los embutidos. Los intensos sabores cárnicos, salinos y grasos del jamón y ese choricito requerían de un vino potente y "frutosísimo" ): como el nuestro, rico, rico.
VIDEOCATA: https://www.youtube.com/watch?v=_Qv-EplK5Og
Salud-os!!
Picota cubierto, con reflejos negruzcos y borde rosa. Tinta la copa al moverlo. Limpio y brillante.
Fruta negra, curry, cacao, tabaco de pipa, balsámicos, nuez moscada, cedro, pinar, mucha pimienta, comino... Indudablemente, se trata de un vino mediterráneo, y allí, ustedes saben que las especias de monte bajo son las que mandan.
Boca voluminosa y estructurada. Paso aterciopelado, si bien el tanino es algo agreste. Densidad mitigada por una notable frescura, de todas formas, 15º son 15º. Describiremos en esta fase, notas no detectadas en la anterior, como la sangre, los toques a endrina o la sal.
Un vino fortachón, que está por limar y que estos calores le perjudican. En todo caso, y dentro de su estilo y gama, tiene buenos mimbres.