Un cuchillo

Botella ahí olvidada desde hace un año, un regalo de estos que un día te encuentras en la cuvée por ahí perdido, no lo había probado, y quizás por eso no lo tenía en mente, ahora difícilmente se me olvidará, la botella es de 0,5 l., ayer, siguiendo con la saga Nectar de Dioses continúe con la entrega III, ¡¡qué descubrimiento!!, todo un magnífico y agradabilísimo despiste el que te hace respecto a lo que te esperas entre la nariz y la boca, nariz inclinandose a oloroso y boca descarada de amontillado, la magia de los Palos Cortados, pero este me ha impresinado en boca es un cuchillo, te entra, te corta y cuando ha salido no te das cuenta, al rato es cuando parece que te ha entrado hasta las entrañas, te hace volar y te hace disfrutar, copa, muñeca, otra vez copa, de nuevo muñeca, es un juego que te hace sentirte como un niño aprendiendo a jugar con un nuevo amigo.

No en vano y por esa sensación en boca me "recordó" al magnífico NPI, es de las 3 entregas el que menos persiste en boca, pero de que estamos hablando ¿que "solo" dura un minuto y medio?, ay si en Gabacholandia tuvieran esto, que precio tendríamos que pagar, pues sencillamente una fortuna, pero afortunadamente para nosotros no es así.

Vino de culto, reflexión como las otras 2 entregas, que inunda la sala donde estés y que se presta a estar con la mente en blanco y con el único objetivo de intentar que no te machaque, pero al final estos vinos con como Kasparov, un maestro al que si te enfrentas, pierdes seguro.

Recomendado por 1 usuario

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar