Un espumoso para hacer olvidar al champagne

Fantástica botella y la caja que la acoje. La primera impresión es muy buena. La botella da muy poca información y la caja algo más. Deja claro que es un milesimé. Encuentro a faltar información sobre las variedades con las que está elaborado y la fecha de degüelle, aunque es habitual que no se ponga esta última.

Color amarillo entre pajizo y dorado, explosivo en la burbujas, pero una vez estabilizado en la copa presenta abundante y muy fina burbuja. Muy límpido.

Aromas a bollería de mantequilla, cítricos. Como a pomelo rosa.
Ahora me asoman a pan poco hecho, como el pan de baja fermentación, un fondo a levadura...

En boca es cremoso, terso, fresco... Muy rico y sabroso. Un gran espumoso para ocasiones especiales (o cada día si se puede permitir), o regalar y quedar como un señor.

Lo maridé con una tabla de quesos de vaca, dos holandeses y uno del prepirineo. Son quesos muy curados pero cremosos.

Este espumoso es de los que de demuestran que en RCP los buenos cavas como este se baten con ventaja frente a los champagnes de precio similar o superior.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar