Vino blanco mallorquín con marcada personalidad

El vino Sa Fita 2014 tiene color amarillo verdoso con reflejos dorados.
Se abre con un bouquet de hierbas aromáticas muy fresco; le siguen la fruta blanca (pera) y marcadas notas minerales de piedra blanca. Con mayor aireación la fruta se dulcifica y pasamos al plátano maduro y a la carne de membrillo pero sin perder en ningún momento esos recuerdos a piedra blanca de acantilado.
La boca es un espectáculo en el que se repite la mineralidad aderezada con un punto salino, muchísima frescura frutal y un fondo amargoso que equilibra el conjunto en un vino con tacto estructurado dentro de su ligereza y marcada personalidad.