El que inauguró el linaje, que será legendario, de los Acediano.

Vino elaborado a partir de uvas íntegramente procedentes del viñedo que da nombre al vino, un viñedo privilegiado, de esos que quedan pocos en Ribera del Duero (en Nava de Roa, 820 metros de altitud, 51 años bien llevados, suelo calizo, exposición sur).

Lo catamos unas horas después del 2010. 2010 en la comida, 2009 en la cena.

Gustándonos sobremanera ambos a los que tuvimos la oportunidad de catarlos, yo me quedé con el 2010 y sin embargo otros se quedaron con el 2009.

Por qué me quedo con el 2010? Porque está para disfrutarlo hoy, ahora, ya.

Por qué se quedan con el 2009? Porque tiene hechuras de grande, de vino de guarda, de los que mejoran año a año hasta nadie sabe cuando. Porque este 2009 tiene un brío, un nervio, un vigor, una tanicidad, una acidez, una fruta en sazón y una estructura escandalosa. Porque este 2009 todavía muestra rugosidad, cierta astringencia... ¡Qué raza!

Y yo me quedo con el 2010 por que me tengo que quedar uno pero... ¡cómo estaba este 2009! Destacable también la capa, la potencia cromática, con el corcho en perfecto estado con la punta, al igual que su hermano menor, negra zahína.

2009 añada fresca - 2010 añada cálida.

Queremos más "Acedianos"!!!

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P.D.: para leer la cata de Acediano 2010 pincha aquí