Elegante y redondo.

De color rojo picota de capa media-alta, con un ribete rosado y todavía algún destello violáceo, lágrima ligeramente tintada, fina y densa de caída lenta.

En nariz muestra una intensidad más bien alta, muy elegante y seductora, complejidad, fruta roja y negra, cierta maduración, floral, violetas y con un fondo balsámico fino (hierbas mediterráneas, tomillo, pino …) que le da frescura a todo el conjunto, con un punto dulce, de caramelo, regaliz rojo, un sutil tostado, con un apunte cafetal y fino chocolate, con un toque especiado. Frutal, floral,  elegante, fresco y profundo. Me recuerdo a aquellos buenos y finos Syrah de Ródano.

Amable entrada en boca, fresca, sedosa, con un punto dulce, cierta estructura, fruta negra madura, ligeros amargos amables, tanino muy integrado,  aterciopelado, acidez muy equilibrada, alguna nota de grafito, cierta mineralidad, regaliz, fina madera y cacao. Postgusto medio-largo. Muy buena evolución, a más finura y elegancia, y todavia con vida por delante, yo diría 2-3 años más por lo menos. Elegante Priorat de Alfredo Arribas.