Acudimos a Sancta Sanctorum en nuestra visita a Denia espoleados por las criticas que leimos en este portal y la verdad es que no puedo mas que ratificarlas, ya que disfrutamos de una excelente cocina de producto con un trato excelente.
Empezamos con media docena de erizos de mar, aprovechando la temporada, y no desmerecieron (1/2 docena de erizos 9€), para continuar con el surtido de cocas (pequeñas de tomate, anchoa, cebolla, sobrasada a 1’4 €/udad y de foie mediana 4’5€, donde hay que destacar excelente trabajo en lo referido a la masa).
Pasó también por la mesa la ensaladilla (4’5€ y como con toda buena ensaladilla, siempre me parece poca), unos boquerones fritos con un excelente punto de fritura (8€), huevas de sepia con el punto ideal de plancha (7 €), sepionet tiernísimo (11€) pulpo al horno (12 € y que dentro de lo excelente fue el punto mas bajo, ya que en el guiso, la matería prima se desdibujó un poco)y para rematar, como no, la gamba roja de Denia (110 €/kilo) de la que no hay que añadir nada.
Continuamos con los postres caseros, excelentes: una tarta de naranja maravillosa (5€), coulant de chocolate (6€) y tarta de manzana (5€)
Servicio excelente, donde además cumplieron con una manía personal con el cambio de platos y cubiertos: 3 veces nos cambiaron los servicios
Dos cafés solos (1’20 €) y uno con hielo (1’5 y esa manía de cobrar 30 céntimos por dos cubitos) , agua de medio litro (1’9 €) y 3 cervezas (2’20 € c.u.).
Total de 220€ para tres (satisfechos) comensales.
Volveremos

Local habitual al que acuden los locales de Denia, gracias a un producto de calidad a precio razonable. Decoración moderna con un servicio muy atento, para un restaurante que empieza a ser un clásico y referencia a pesar de su corta existencia.

De esta visita: Muy buenas las tellinas (muy buen producto) y un curioso pulpo asado, que es un marmitaco muy jugoso. Los chipirones son impresionantes, acompañados por unas impresionante tosta de pan caliente con ali oli, una combinación increíble y muy recomendable, pero sin duda la estrella de la visita es el “atún a la plancha”, impresionante filete de atún, marcado a la plancha pero prácticamente crudo sobre guarnición de vegetales, hortalizas y dados de patitas fritas, una locura de plato en el que el producto es impresionante.

Carta de vinos interesante en el que se valora productos de la tierra, destacando Santa Rosa o Maduresa.

Segunda parada de nuestra ruta de barras por Dénia. Como la opción II que teníamos pensada nos ha fallado (cierran la cocina a las 22.30) decidimos acabar aquí. Pedimos bastante más de lo previsto:

- Cañaillas: servidas sobre hielo picado una buena ración. Frescas.

- Hueva de sepia a la plancha: delicioso manjar. De sabor suavísimo se puede dotar de contundencia "pringándolas" con el allioli que acompaña.

- Cocas de foie: Es una de las tapas estrellas. Riquísima la masa de la coca y, sobre ella, unos medallones de foie a la plancha, cebolla caramelizada y una reducción de Módena.

- Taco de atun a la plancha: fresquísimo, apenas marcado en plancha, totalmente crudo al centro sobre un lecho abundante de patatas fritas, calabacín, pimiento rojo a daditos. Excelente la guarnición.

- Botella de PAzo de Señorans (cubitera)

- Café: bueno.

Local precioso, como ya dije en el anterior comentario, servicio amable, comida rica, carta de vinos con bastantes referencias y precios muy razaonables (por eso puntúo bien el servicio del mismo)... Aconsejable 100%

Llevo varias visitas desde que abrieron todavía no hace ni un par de años y éste es el mejor indicador del alto grado de satisfacción. El local en sí ya es una preciosidad: moderno, acogedor, comodísimo y perfectamente aislado para evitar la reverberación en momentos de "sala llena" (cada fin de semana). El personal que atiende, padre e hijos, amables, simpáticos y profesionales (se notan los años de dedicación a la hostelería).

La carta es un compendio de tapas típicas eminentemente fundamentadas en el producto del mar (sepia, calamar, cañaillas, erizos en temporada, ostras, boquerones, pulpo...), otras "de la tierra" (cocas, embutidos, patatas..) y un par de "platos" de carnes y pescados. Algún pequeño guiño a la modernidad: cocas con foie y cebolla caramelizada, mini hamburguesas... Todo en general está rico, rico.

Esta vez tomamos cocas de foie, patatas con allioli, huevas de sepia y medallones de solomillo ibérico (sobre una cebolla crujiente muy original y rica).

Acompañamos con Pazo de Señorans. La carta de vino es extensa e interesante, cosa que, para mi, le da mas "caché" al sitio. Lo mejor de todo, los precios incrementando muy poco los precios de venta al público en comercios.

Todo lo escrito invita a repetir más veces y, EMHO, a aconsejar la visita al lugar.

Para disfutar de un tapeo tipico de Denia, hay que ir a este restaurante.
Figatells, cocas... junto con huevos rotos, mini hamburguesas, verduras a la plancha.
De bebida tomamos clarita. (cerveza con fanta de limón).
Postres buenisimos, nuestro preferido la tarta de manzana con helado de vainilla.
A mejorar el servicio (un poco lento), pero muy correcto.