Hemos estado mi chico y yo comiendo con un dakotabox y nos hemos quedado atónitos. Magníficos platos a compartir con sabores frescos y asiáticos. El postre maravilloso y delicioso. El personal tanto de cocina como la chica que nos atendía maravillosos y únicos. Por último, los platos muy creativos lo que hace único este restaurante.

... y ahora explicaré porqué....
Ibamos en viaje de trabajo a tierras manchegas y ya el dia anterior calculé que tendriamos que parar a comer en la A-4 antes de llegar a Madrid. Pensé en Aranjuez incluso.. pero eché mano de la mejor guia de restaurantes del mundo (Verema ..desde luego) y veo que hay una sorpresita en Turleque. Pues bien, preparé reuniones etc de forma que a las 13,30 o 14:00 pudieramos parar alli a comer. No se me ocurrió reservar al tratarse de una comida en miercoles..
El restaurante es el tipico de carretera donde sirven platos combinados y menu del dia y vemos que hay un comedor tipo provenzal y vacio y nos dicen que solo es si venimos a comer a la carta. DEcimos que si y nos hacen pasar. Tengo que decir que nos tuvieron esperando casi media hora sin dejarnos ni carta ni nada y trayendo solo una botella de agua y un plato de queso. Por fin nos traen la carta y veo que se trata deuna carta mas o menos "normal" donde esos platos que en otros comentarios se describen no aparecian. Incluso en su pagina web anuncian un menu degustacion con un aspecto excelente. AL venir la camarera le preguntamos y nos dice que claro que se elabora todo eso pero avisando al menos el dia antes... y aqui esta el porque de mi error...si hubiera llamado el dia antes que ya tenia decidido que parariamos alli habriamos podido degustar lo que aquie se ha comentado o lo que aparece en su web y que por otra parte con lo que comimos, quedo claro que habia "madera".
En fin.. otra vez sera. Nosotros nos tuvimos que conformar (por decirlo asi, ya que todo era muy bueno) con:
- plato de queso machego y chorizo frito (cortesia de la casa)
- Ensalada de perdiz escabechada
- Esparragos a la brasa de carbon de encina con piñones caramelizados
-pisto con huevo y lombarda
- foie micuit casero con una salsa de citricos

Cafes.
Para beber no tienen carta. Realmente nos dijeron que en la carta hay muchos vinos que ya no tienen y nos preguntaron de que region queriamos y asi nos decian la oferta. Elegimos la tierra y solo tenian Mano a Mano a 15 €, El Vinculo a 20€ y Gran Calzadilla a 35~. NOs decantamos por el Vinculo que acompaño correctamente la comida dado que ademas teniamos 100 kms todavia hasta Madrid.
En resumen, nos quedamos con la miel en los labios por las exquisiteces que se comentan pero salimos satisfechos con lo que comimos.
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Volvemos por la zona y con la recomendación de Ramón en la cartera. Llamamos a Humberto con tiempo y nos prepara un menú maridado por 40.-€

Para entradas por cada cuatro personas:

• Surtido ibérico con pan tostado y tomate natural. Muy buena calidad
• Revuelto de morcilla manchega. Rico
• Espárragos trigueros al carbón con vinagreta de piñones. Muy buenos

Pescado
• Bacalao al romesco. En su punto y buena ración

Carne:
• Chuleta de lechón Ibérico a la brasa. Buena elaboración, muy bueno

Postre:
• Pastel de la casa de chocolate sobre crema catalana, llegamos a duras penas, pero también muy rico

Bodega
• Blanco: Martue Chardonay
• Tinto: Marques de Griñon Syrah 2004 / CS 2002
• Espumoso: Reymos (moscatel menudo)

Teníamos dos posibilidades, dentro del restaurante o en la terraza que da al parking y, elegimos fuera que aunque parecía al principio que tendríamos calor, se quedo una noche magnifica.

La RCP es estupenda, el servicio amable, y Humberto se desvive por agradar.

No lo hemos dudado, después de participar en una cata en Alcazar de San Juan nos hemos presentado, esta vez sin avisar, en este restaurante, digamos, de carretera, porque es donde está. Pero nada más lejos del estereotipo que tenemos sobre estos locales.

Digo sin avisar porque en la ocasion anterior Humberto nos preparó un menu degustación en concreto, esta vez le hemos pillado por sorpresa, y nos hemos encontrado con mucho oficio.

De nuevo sorpreson plato tras plato.

Ensalada de atún rojo con su aliño, impecable

Timbal de Tiznao, espectacular

Filete de ternera a la plancha, nada que ver con un filete de ternera a la plancha.

Cordero asado a baja temperatura, un alarde de preparación previa, que se ha convertido en una verdadera maravilla en el plato, jugoso, sabroso, soberbio.

De postre hemos rematado con una leche frita, que de por si estaba suave y sabrosa, pero que acompañada por una reducción de café con leche, casi espuma, ha estado brillante.

Acompañado por un blanco, no recuerdo el nombre, y un El Vinculo, perfecto. Una copita de Tokaji 4p. ha sido el remate final.

Sigue teniendo verdadera inquitud por los vinos, fuera de carta te encuentras con alguna novedad de la zona, sin descuidar el resto de DO, claro que estando en La Mancha mejor descubrir algo en condiciones, y Humberto las tiene.

Sin vinos, 35.-€ pax, imbatible.

Casi siempre entendemos los restaurantes de carretera como algo muy de paso, bocata, wc, y a seguir.

La Chimenea cambia por completo este concepto por derecho propio.

Dos ambientes diferenciados, la inmensa barra de la entrada para atender al viajero de paso, y un salón más tranquilo para los que prefieran tomarse algo más de tiempo.

La carta es variada, pero en nuestro caso hablamos con Humberto previamente para que nos preparase un menú especial.

Empezamos con una tabla de quesos manchegos con mermelada de tomate y
frutos secos al centro de mesa, bien acompañado por un Alma Valdeguerra, fresquito y que se dejaba beber muy bien.

Seguimos con unas entradas:

Huevo trufado a baja temperatura y espuma de patata. Muy conseguido

Arroz com bogabante del cantabrico. Contundente, generosa ración y sabrosisimo

Pisto manchego de la huerta con huevo de codorniz y polvo de jamón. Gustó mucho, como nos engancha lo tadicional

Verduritas salteadas con salbia y queso de cabra. En su punto, el queso bien atemperado, cremoso

Continuamos con una merluza a baja temperatura con espuma de avellana y reduccion de balsamico de textura impecable.

De carne nos ofreció un filete de lomo de Kobbe con salsa de teriyaki, jugoso y tierno.

Terminamos con una espuma de Mango natural fresca y acida, muy rica y una mousse de chocolate blanco, rica, rica.

Los vinos:

A parte del aperitivo de Alma, para los entrantes dimos buena cuenta de un Martue Chardonay 2008, Flor de Divinus Chardonay FB 2005; para los segundos, Dueto 2002 y Pinuaga 2004. A los postres un espumoso Reymos.

A 98 kilómetros de Madrid en la carretera de Andalucía podemos encontrar este restaurante. Humberto al mando, sincero y profesional, apuesta por una cocina de la tierra con productos de temporada, con algún toque moderno.

El restaurante esta junto a una gasolinera, en principio parece uno de los muchos restaurantes de gasolinera, pero existe un salón apartado del resto para otro tipo de comensales.

Para la ocasión Humberto nos preparo un delicioso menú, personalmente me encanto el pisto manchego con huevo de codorniz, la merluza a baja temperatura, y el lomo de kobbe con salsa teriyaki. Pero pudimos degustar también una tabla de queso para los aperitivos, unas verduritas asadas con queso de cabra, y un arroz con bogavante también muy buenos

Existe un interés por los vinos y su correcto servicio, en este apartado nos dejamos llevar nuevamente por Humberto, y pudimos disfrutar de un Alma de Valdeguerra 2008 para los aperitivos, un Martué Chardonay 2008 para las entradas y para los segundos: Dueto 2002, Pinuaga 2004, Reymos espumoso.

Es cierto, que queda un poco lejos de Madrid, pero siempre se puede organizar una visita de paso por la carretera de Andalucía.