Cena para 6 personas. El ruido sigue siendo el punto débil. El local no estaba lleno y por momentos era imposible oír nos.
Lo demás impecable.
No me votan extender porque no probé ningún plato nuevo. La ensaladilla, el pisto,el pez mantequilla ya la carne muy rico. Echo en falta los huevos de El Padre y así también lo dijo alguno de la mesa.
También el apartado de postres lo veo flojo y de nuevo echo en falta esa rica tarta de queso.
En vinos nos sorprendió David una vez mas y con servicio impecable.
He borrado las fotos y solo recuerdo un italiano de l'abruccio muy rico... Vaya faena haberlo perdido.
El precio unos 36 euros por persona

Otra visita.. la tercera...de nuevo a Angelita. Esta vez en grupo y con ganas de “jugar” con los vinos.
En este caso le pedimos a David que nos presentara los vinos a ciegas . Fueron unas sorpresas donde poco acertamos… Se corrobora que “cuanto mas creeemos que sabemos, menos sabemos”.
Los vinos fueron:
*Priorat de Fredi Torres. Impecable y sorprendente
*12 Verten Douro de Nieport. Descubrimiento
* Intelego syrah. Sudafrica. Bueno…. Algo diferente. Pero que no nos gustó

Pasatiempo para acompañar …
La cena:
*Rusa con gambas y piparras. Para repetir y repetir ( y mas con el panazo de la Miguiña)
* Pisto con huevos escalfados… mejor imposible
* Pez mantequilla con un cus cus o rissoto ( no recuerdo) a la trufa, En principio me dio “mal rollo” porque olia a trufa muchisimo y pense… aceitazo aromatizado. Pero sorpresa al probarlo. Sabor sutil y no me repitió nada.
* Unos boquerones frescos ( anchoas que lo llaman muchos) con un refrito de ajito y vinagre. Ricos
* Carnaza de esa vaca vieja y cayeron varias raciones. Acompañada de los pimientos asados a la leña ( que saben a eso) y patatas fritas, esta vez con piel que estaban ricas pero prefiero las caseras clasicas.

Como postre compartimos una crema de mascarpone con frutos rojos y algo de chocolate que no nos dijo nada.
Es una pena que los postres aun no estan a la altura. Esa torrija y sobre todo esa tarta del queso de El Padre, se echa en falta.
Por cierto que espero solucionen el problema de la insonorizacion porque esta vez ya fue mas que evidente... y molesto. pero son conscientes de ello y seguro que lo haran.

Luego bajada a la cocteleria a los GT… donde nos dieron las 3….
La cuenta sin GT a unos 46 € por persona. Los GT entre 8 y 11. Algo carillos sobre todo si has cenado alli. Es mas un precio de bar de copas. En cualquier caso, impecable la cocteleria con Mario al frente y un fichaje de lujo ( Borja) que promete..

Había mucho interés en constatar en primera persona el nuevo proyecto tan esperado de Mario Y David. Y cuando nos enteramos de su puesta en marcha de manera oficial no hicimos mucha pereza para presentarnos allí. He de reconocer que he dejado pasar unos días para colgar el comentario puesto que ,como suponía, clásicos de este foro iban a aportar su entrada y cuando uno está en una fase poco expresiva, vienen muy bien para intentar escribir lo menos posible, si como es el caso son opiniones bastante objetivas o cuando menos, muy afines a las opiniones personales de un servidor que es otra forma muy subjetiva de definir la objetividad.

No voy a pormenorizar el escenario que da cobijo a este nuevo concepto de los Villalón, ya está descrito y de una manera muy acertada, no entraré a reiterar las bondades de toda esta gran idea y su desarrollo, simplemente pasaré a resumir cual fue nuestra experiencia de una manera sencilla.

La posibilidad de pedir medias raciones da la opción de adquirir una mayor perpespetiva de una carta de comida no muy larga:

1/2 Chacinas de Mar y Montaña donde la parte marina era la presencia de unas buenas huevas de maruca.

1/2 Ensaladilla Rusa de Gambas

1/2 Pisto OX

Suquet de Rape

Espárragos asados con jugo de cebolla

Torrijas

Platos comentados con acierto en comentarios previos y siendo desde nuestro punto de vista ganadores con diferencia el pisto y los espárragos, aunque sin desmerecer el resto. Las torrijas no estaban a la altura de la parte salada.

En el apartado de vino optamos por beber copas de vinos según nuestras apetencias y las de David, además de intercambiar con algunas mesas vecinas ocupadas por buenos amigos lo que teníamos en las copas con el consiguiente festín "multicolor"...

Es probable que me deje alguna referencia en el camino pero de lo que me acuerdo fue:

Manzanilla Sacristía, Manzanilla Barbiana, Champagne Chamery Brut, Palo Cortado Cruz Vieja, Oloroso El Cerro y dos copas de un vino blanco portugués de la región del Dao muy gastronómico y de gran personalidad y cuyo nombre no recuerdo en estos momentos.

Café e infusión. Dejaremos para otro día el espacio reservado a la coctelería.

Me considero muy afortunado el poder atestiguar la gran trayectoria de esta familia desde sus más remotos orígenes allá en el barrio de Malasaña hasta haberse convertido en el gran referente que son hoy en día dentro de la hostelería madrileña.

Local ya descrito,grandes cristaleras,mesas de madera,mural del cuadro Metroplis (Georg Grosz),al fondo..Como inconveniente, muy ruidoso al llenarse el rte. Como había leído las reseñas,sabía más o menos lo que iba a pedir:ensaladilla,corazones de alcachofas con langostinos y pisto.Destacaría este último,así como un excelente pan (lamiguita).Carta de vinos "Espectacular",creo que de la D.O.Borgoña sera la más extensa de Madrid.Algunas botellas de Champagne A.Selosse dificiles de encontrar,pero a precios acordes .David ,muy accesible me aconsejo un albillo que no conocía"La Peguera"..que mejoro al abrirse en unas mágnificas copas,que nos cambiarón. No hubo postre,ni cafe...
Tomamos un gintonic,en la magnífica cocteleria de la planta inferior.
Como resumen diría que es un oasis para los enchalados,gastronomicamente la oferta me parece algo escasa.Local bonito,que se vuelve incomodo por el ruido.

De nuevo visita a "La Madre" y todo fenomenal. Esperando una copa de Collantes Fossi que me tiene enganchada. Unos buenos trozos de pan y esa mortadela rica.
Ya en la mesa, con un servicio mas asentado que en la visita anterior y un camarero o encargado que nos gustó y que no conociamos de la vez anterior,
Para beber un vino de Dominio del Bendito El primer paso ya que ibamos a carnaza esta vez.

Dos personas compartimos lo siguiente:
* Ensaladilla rusa de gambas. Gran plato
* Pisto con huevos escalgfados. Lo bordan
* Ternera rosada ( creo que del Esla) recomendada por David y por algo era... fabulosa
* Vaca vieja, Ese lomo madurado que ya conociamos y que estuvo como siempre.
De todo fueron medias raciones pero quedamos hasta arriba
Para terminar un postre que ahora no recuerdo pero me dejo algo indiferente.

Fin de comida en la cocteleria de la planta baja. Buenos GT mas caros que en El Padre y no tiene precio fijo de copa como ocurria alli. En cualquier caso no pasan de los 11 €.

El banquete fueron 100 €.

En resumen , no se puede pedir mas. Ya tengo otras dos citas proximas para visitarles de nuevo.

Tras poco más de medio año de montaje, aquí tenemos el nuevo proyecto de los hermanos Villalón que tan buen recuerdo nos dejaron con su trayectoria al frente del Restaurante El Padre. El espacio resulta espectacular, moderno, multifuncional, en una calle de gran movimiento turístico situada entre Gran Vía y el barrio de Chueca. La planta alta es un comedor amplio y diáfano, de techos altos y enormes ventanales, con mesas cómodas y no muy juntas y una amplia barra para tapear o tomar unos vinos o vermouths. En la planta baja hay un espacio dedicado a los cócteles y destilados donde también se puede picar, con un ambiente más tenue e intimista, buena barra y cómodos sofás, sonando música ambiental, un lugar perfecto para tomar una copa de tarde o disfrutar de una larga sobremesa.

Nos sentamos en nuestra mesa mientras tomamos una copita de Amontillado Fino Fossi (3,5€) y echamos un vistazo a la carta con una docena de raciones de todo tipo para compartir, algunas con la posibilidad de media, quizá el problema es que las raciones son perfectas para dos y no tanto para tres, así que hubo que dividir con un cierto cuidado…

Rusa de gambas y piparras fritas (12€): buena ensaladilla para comenzar, con una mayonesa aromatizada en el jugo de las propias gambas. Se acompaña con unas sabrosas piparras, aun no estando en temporada.

Pisto de tomate OX y huevos escalfados (14€): uno de los platos estrella de la andadura en El Padre y que siempre funciona, ahora con los huevos escalfados. Magnífico.

Alcachofas con langostinos (13,5€): buena alcachofa aunque solo con dos langostinos, un plato correctamente ejecutado aunque sin sorprender en exceso.

Suquet de rape (19€): muy bueno sin duda, caldo oscuro y sustancioso, con mucho fondo, patata bien cocida y abundantes trozos de rape. Cuchara y pan a funcionar.

Lomo de vaca vieja zamorana (29€): una carne que ya servían en su antigua casa y que resulta un prodigio de sabor y ternura, un producto de gran calidad. Se acompaña con los excelentes pimientos asados de la casa y con unas patatas fritas impecables.

Torrijas (6€): de postre había bien quesos, arroz con leche (se había acabado) y las habituales torrijas, prescindibles en este caso.

Cocina todavía por asentar, con algunos platos de su anterior etapa en El Padre y otros nuevos que quieren cambiar el concepto de la oferta, creo que por aquí deben definirse un poco y ver hacia dónde quieren ir, personalmente pensamos que lo mejor es basarse en el producto que siempre han manejado y no complicarse mucho en las recetas, porque en esta casa el vino va a estar por encima de la cocina, aun así hay que decir que platos como el suquet, la carne o el pisto merecen mucho la pena. Y a unos amigos les sacaron un jarrete de 2kg con muy buena pinta…

Y desde luego que el apartado del vino resulta apabullante, situándose nada más comenzar entre lo mejor de Madrid aun con muchos ajustes pendientes. De momento impresiona la tabla de vinos por copas, con unas 30 opciones de todo tipo y colores, con una selección inteligente y de calidad. La carta no tiene desperdicio, unos 40 Champagnes, otros tantos Jereces, más de 100 referencias de Borgoña, unas 30 de la zona de Gredos, un espectáculo. Falta por ir completándola con algún riesling alemán, vinos italianos, otros generosos del mundo, algún Rioja viejo, pero ya está entre las mejores de la capital y probablemente en Borgoña sea la mejor. Precios bastante ajustados, se pueden beber grandes vinos sin arruinarse, algo muy importante. Además de las copas de Fossi iniciales, pedimos un excelente Champagne Jerome Prevost La Closerie Les Beguines 2006 (75€), maduro y en un momento perfecto de consumo y un igualmente excepcional Domaine Roulot Meursault Les Meix Chavaux 2008 (98€), uno de los grandes Borgoñas blancos. Igualmente llegaron a nuestra mesa copas de un más que correcto Brunello di Montalcino Vitanza Tradizione 2010 y de un sorprendente (ganador de la última cata USA del Mundovino) Cristom Pinot Noir Eileen Vineyard 2013, un fresco y finísimo pinot noir de Oregón.

El tema de las copas todavía debe ir mejorando aunque nos gustaron las que tenían para Champagne y Borgoña, nos comentaron que van a ir aumentando la gama poco a poco. En cuanto al servicio de mesas deben igualmente ir formando más sobre todo en tema vinos a los camareros, pues se nota bastante en cuanto David no toma directamente las riendas, es algo que con el tiempo se irá puliendo. Por el resto muy bien, servicio joven y agradable, explicando perfectamente cada plato aun dentro de la sencillez de los mismos, percibimos ganas de agradar y eso es muy importante.

Finalizamos, cómo no, en la parte de abajo disfrutando de la coctelería y en nuestro caso de un excepcional malta Mortlach 1997 by Signatory. La carta diseñada por Mario es de primer nivel con más de 50 cócteles y una lista de ginebras, rones o maltas que supera ampliamente el centenar de referencias, con este espacio va a competir con todas las armas en la que es la calle más coctelera de Madrid. Un lugar donde haremos grandes sobremesas, invita sin duda a ello. Con respecto al precio final pagamos 287 euros tres personas siempre teniendo en cuenta que casi 200 fueron en vino, por lo general se mantienen los precios de su anterior etapa en El Padre y la RCP en general es francamente buena, aquí se puede comer con muy buenos vinos en torno a los 40-50 euros por persona.

Primera toma de contacto con Angelita Madrid y nos vamos con la sensación de que, cuando vayan puliendo defectos de juventud, estamos ante un local que va a triunfar por puesta en escena, orientación de negocio y una oferta de vinos y destilados prácticamente sin igual en la capital, todo dirigido por dos hermanos que son una referencia en la hostelería madrileña pese a su juventud. Vamos, que lo van a petar…

POr unos dias me ha ganado Lorden en comentar el esperado Angelita Madrid. Ya comentado por el pero dejo mis impresiones:
Teniamos muchas ganas de conocer el nuevo proyecto de los hermanos Villalón tras su salida de El Padre. Recien inaugurado la semana pasada y tras reserva el dia anterior alli acudimos a comer y continuar.
El local es muy luminoso y acogedor. Mesas de madera, sin vestir, como se lleva ahora. Buena cuberteria y coperio que compensa todo esto. Zona de barra amplia para poder tapear y carta de vinos por copas expuesta en pizarra que quita el hipo. Con una excelente oferta de generosos y vinos no comerciales (por llamarlos asi).
Por nuestra parte, hay que decir que la atencion de David y Mario no ha podido ser mejor, un reencuentro muy esperado.
En la carta se echan en falta los famosos huevos del El Padre. A cambio, sugerentes propuestas que son un acierto.
Nosotros empezamos con unos generosos invitacion de David.
Una copa de La bota de Amontillado 58 y otra de Oloroso Callejuela. Sin palabras.
El agua es de Madrid . O sea del grifo y sin cobrar … como debe ser.
El pan se oferta por separado a 2 € el cesto. Y que pan… no preguntamos si lo hacen ellos o de donde lo traen. Un pan excelente de dos tipos, blanco y centeno.
Acompañando el oloroso una tapita de una mortadela siciliana con unos picos . David nos guia al vino tras decirle nuestra eleccion de comida y nos presenta 4 botellas,… no voy a decir las que eran pero todas excelente eleccion. Elegimos un montsant La selección de 2014 de Antoine Touton &Fredi Torres . Ligero y fresco. Excelente eleccion.
La comida puede disfrutarse en medias raciones lo que siempre es un plus para probar mas. Nosotros elegimos.
• Rusa de gambas con piparras fritas. Perfecta ensaladilla mas jugosa que una ensaladilla rusa. Pedimos media pero habria caido entera
• Bacalao negro con crema de calabaza y chirivia. Sencillo y excelente punto de pescado
• Mollejas crujientes con setas confitadas. Muy ricas. Con un toque de lima que las hace mas ligeras
• Medio picanton en pepitoria. Salsa de las de toda la vida donde casi acabamos el pan
Terminamos con café y continuamos,,,,,
La planta baja es el reino de Mario, la cocteleria. Afortunadamente el sabado abren antes de las 5 lo que nos permitio disfrutar del GT. Por cierto que seria magnifico que ofrecieran el café alli . El lugar es inmejorable, con recuerdos a Le Cabrera pero en “amplio”. En la barra Mario y Borja nos deleitaron con sus preparaciones aunque nosotros degustamos dos GT de ginebras secas con Schweppes. Una SW y otra The Botanist.

En resumen, para volver y volver y recomendar. Son unos crack a los que echabamos de menos pero han vuelto por la puerta grande.
La cuenta con todo esto 80 €.

Antes de comenzar deciros que me hace especial ilusión escribir esta reseña porque sé que El Padre era uno de los restaurantes favoritos de los foreros de Verema, y que detrás de mi comentario vendrán muchísimos más.

Para muchos aficionados a la gastronomía, el traspaso de El Padre de la calle Serrano fue una pésima noticia, pues en pocos sitios de Madrid se cuidaba tanto el asunto del vino, los combinados y los cócteles.

Meses después, resulta que los hermanos Villalón, las "almas mater" de aquélla casa se han embarcado en un nuevo proyecto en Chueca, en la calle Reina, llamado ANGELITA MADRID. Se trata de un local precioso distribuido en dos plantas. En la superior lo que llaman "Bar de vinos", el restaurante propiamente dicho, que cuenta con una amplia barra con banquetas altas y unas veinte mesas dispuestas en un espacio diáfano, decorado en tonos claros, con techos altos y grandes ventanales. En la planta sótano, el "Bar Americano", decorado en plan bar clandestino de los años 20, maderas oscuras, sofás chester, etc. donde se puede terminar la comida tomando un cóctel o un combinado, y si se prolonga la cosa, tomar alguna tapita de cocina de "fusión" para acompañar las copas.

Carta de condumio corta, con platos de temporada, ensaladas, carnes y algún guiso, con especial atención a la excelencia de la materia prima. Dos personas, pedimos, en formato media ración, los siguientes platos:

Ensaladilla rusa de gambas, servida con piparras y chips de fruta, con los ingredientes cortados bien menuditos, cremosa y suave. Muy buena.

Callos a la madrileña, con pata y morro, contundentes y con el punto de picante adecuado. Especial mención a la deliciosa morcilla de sangre. Excelentes.

Pisto con huevos. El pisto, realizado con verduras de producción propia y huevos escalfados de gallinas del pueblo, todo con sabor a lo que tiene que saber. Tremendo plato.

Finiquitamos con medio picantón en pepitoria, con una salsa para no dejar de mojar pan. El pollo de buena calidad, aunque demasiado poco hecho para nuestro gusto.

Carta de vinos enciclopédica, más de 500 referencias españolas y foráneas, espumosos, generosos, etc., para todos los gustos y bolsillos. Una locura. Decidimos ponernos en manos de David, que nos puso un tinto de Toro, "El Primer Paso" de la Bodega Dominio del Bendito, intenso, elegante y complejo, que efectivamente fue una bendición para acompàñar la comida.

Mesas de madera sin vestir, servilletas de tela y vajilla de nivel. Servicio simpático, atento y explicando los platos. Pagamos 55 euros por todo, una excelente relación calidad-precio.

Pues nos ha gustado mucho esta Angelita, aunque hay que venir mentalizado porque en esta casa el protagonista es el vino y la cocina es secundaria, aunque se come muy decentemente. Venid antes de que se ponga imposible.