Viaje al Bierzo a visitar una bodega, Soto del Vicario y de paso a coger cerezas. Nos alojamos en este microhotel que está frente al Castillo de Cristobal Halffter y desde donde se puede llegar a oir sus ensayos.
Está explotado directamente por la propiedad, Pilar y Herminio, se llaman y peregrinos del camino que quedaron encantados en su paso por Villafranca del Bierzo.
Solamente tiene 7 habitaciones y todas ellas tienen nombre, así: El Mar, La Novela, Cristobal Halffter, etc.
Mi mujer y yo nos alojamos en la denominada El Mar, que está decorada con motivos marineros de Ibiza, azulejos, cartas marinas, fotografías y cuadros originales de firma.
La habitación ambientada con mucho gusto, no es muy amplia, pero es lo justo que necesitan 2 personas. Situada con vistas al castillo y con una magnífica cristalera de galería.
La habitación y el hotel dispone de Tv. TFT con canales internacionales, Wifi gratuito y ordenador a disposición del cliente, almohadas y camas de viscolatex, revistas del camino de Santiago y de vinos, servicio de lavandería, garaje para bicicletas y facil aparcamiento. El cuarto de baño es de ducha con mampara, con buenas toallas y dotado de gel, jabón,etc. es decir lo habitual y con detalles que le hacen original.
En el precio de la habitación está incluido el desayuno, que consta de : Café con leche o infusiones, Pan de hogaza tostado, Bizcocho de canela, es casero, sublime, hace años que no comía un bizcocho así, Mermeladas de ciruela, albaricoque, ambas caseras y elaboradas por Pilar, tomate y aceite de D.O.Sierra Segura, virgen extra, para las tostadas y zumo de naranje natural y recién exprimido. De todo ello se puede repetir.
Hay que destacar la atención que tienen con el cliente, te sientes como en casa pero con todo hecho. Volveremos.

Microhotel, en el Bierzo a tener en cuenta en escapades por la zona. Al buen restaurante, se unen 7 habitaciones con lo necesario para el descanso: buenos colchones y almohadas, excelentes vistas y trato excelente. A partir de tu llegada ya te llaman por el nombre.

Dado que la zona se presta a la oración y al recogimiento con la misma intensidad que a la buena mesa y al buen vino, el hotel se convierte en una mas que interesante opción. Tan recomendable como el Restaurante.

Desayuno con pan recién tostado, aceite, tomate, mantequilla y mermelada (industrial), dulces casros (tarta de queso y bicocho). Cafe express, pero largo en exceso.