El Sabor amargo de Televisión Española: La cocina movediza de MasterChef

El Sabor amargo de Televisión Española: La cocina movediza de MasterChef
MasterChef, el megaespacio y talent show de La 1, en Televisión Española, como todo “remake”, llega con el pecado original de un jurado “michelinesco”, integrado por Pepe Rodríguez Rey, chef del restaurante El Bohío; Jordi Cruz, a cargo del Abac de Barcelona, mientras Samantha Vallejo Nájera, es la propietaria de Samantha Catering, quienes dentro de su índole obsesivo-compulsiva y evidentemente por compromisos de rating y producción, atendieron más al efecto que a las causas de un buen desenvolvimiento gastronómico, verificado ello, sobre todo, con la expulsión de José David, el controversial y tecnicista “ingeniero informático” de profesión y cocinero valenciano de vocación, que desde el comienzo se ganó la animadversión de una parte no reducida de concursantes y hasta de los encargados de enjuiciar y dar sus veredictos culinarios, en la gala 12 o penúltimo programa de la serie, que ha logrado un récord de 22.4 % espectadores (4 millones 105 mil televidentes han sido registrados como teleaudiencia, en un horario super estelar), a pesar de que con profunda aflicción nos dimos cuenta de que independientemente de haber sido elogiado por sus elegidos comensales y siendo en realidad el que mejor equilibrio consiguió entre los cuatro platos de la prueba de eliminación, la balanza favoritista e impuesta de los árbitros se inclinó hacia el “reposteril” y poco experimentado, pero “dulce y carismático” estudiante de Palma de Mallorca, Fabián León, presentado como “el niño prodigio” de esta primera edición, no sé si preteridamente a cargo de los especialistas ocupados en seleccionar los tres finalistas y al único ganador o por una decisión previa de éstos con la producción y dirección del programa.
Lo que sí nos parece inaudito es que, desde sus albores, al hacer un deslinde de los posibles finalistas, notamos la presencia de preconcebidas rivalidades y animadversiones tendenciosas de un jurado (o de la producción misma, por qué no), que debe permanecer imparcial ante la totalidad de sus concursantes, específicamente, mientras se iba definiendo el cuadro de honor de los finalistas al certamen televisivo. No contentos con la algidez del asunto y la profundidad de nuestra opinión nos fuimos a buscar respuestas y afinidades en otros medios digitales y periodísticos, hasta encontrarnos con varios mensajes por el estilo, como este acertadísimo de “Almolo”, en el foro de Verema:
“Hacía tiempo que quería comentar algo del programa Masterchef por aquí, pero por unas circunstancias u otras no he podido o no he querido.
En primer lugar quería comentar también (no sé si se ha dicho anteriormente) que José David es un forero de verema (no muy activo pero forero a fin y al cabo) https://www.verema.com/usuarios/kurtko que casualidades de la vida ha sido el protagonista absoluto del programa Masterchef, para bien y para mal.
Era sin duda, el concursante con más nivel y más técnica y único que ha realizado una cocina de autor con criterio y sensibilidad, no en vano sus platos han sido considerados los mejores en 7 ocasiones. Este aspecto, sin embargo, ha sido su peor enemigo. El desconocimiento mayoritario que tiene gran parte de los televidentes de lo que es la cocina de autor, unida a la mayor exigencia y presión y la dificultad que tenía de que progresase, han hecho que su salida del programa fuera previsible, sobre todo en los últimos programas, donde la presión, la exigencia y la parcialidad en la valoración en algunos de sus platos, han podido con él y han hecho que no pudiera mantener el nivel del principio del programa.
Lo peor no ha sido esto, sino en mi opinión la clarísima campaña anti José David que se ha hecho tanto en el programa como en los medios, (tachándole de prepotente, copión, etc.), con algunas imágenes sacadas de contexto y otras claramente montadas (basta con 2 o 3 imágenes de esta clase para que mucha gente pueda prejuzgar a alguien en TV), todo esto potenciado por las redes sociales. Está claro que su sinceridad ente las cámaras no le ha hecho ningún favor.
Conclusión. Se ha querido crear dos estereotipos o perfiles claramente enfrentados:
José David: un estudioso de la cocina, con cursos y muchos libros leídos, el competitivo, el que siente pasión por lo que hace y lo exterioriza, el que lo vive, el meticuloso, el que realiza una cocina creativa, muy técnica y arriesgada
Juan Manuel: no es un estudioso de la cocina, no ha leído libros (probablemente solo revistas tipo Hola y Cocina Fácil) que aparentemente no es competitivo, más impasible, con una cocina menos técnica, más humilde y conservadora y por lo tanto menos arriesgada y más para todos los públicos. Todo esto aderezado por la historia dramática del padre.
Está claro que el programa se ha decantado por el segundo perfil, convenciendo a la mayoría de los televidentes que esto era lo que teníamos que aceptar.
Han preparado la marcha de José David, justificando su marcha en el concurso y en diversos medios. Su expulsión está a la vuelta de la esquina, quizás en este programa o quizás en el siguiente (ojalá me equivoque) pero seguro que casi nadie va a "llorar" su eliminación.
¿Nos han querido dar a entender en este concurso que hay que ser “buena persona”, humilde, tener una historia dramática detrás y hacer una cocina conservadora para triunfar en el mundo de la cocina?”
Si miran otras entradas de la misma publicación, he ahí una prueba fehaciente de lo nocivo y tendencioso que puede ser un programa, cuando en vez de armonizar sus elementos en favor de una factura eficaz y de alto vuelo, se intenta enfrentarlos desmedidamente, para conseguir efectismo y “rating”, pasando del mero concurso estilizado y/o constructivo al “reality show” más barato y hostil, en donde se juega e involucra el sentimiento y el sueño de quienes buscan un espacio para expresarse en el cada vez más intransitable medio televisivo transnacional.
Y si a ello se adiciona el resquemor de un jurado, en apariencia asediado por la competitividad y el miedo a las sucesiones de los subsiguientes “chef amateurs”, ya tenemos el ingrediente nefasto, para que un espacio que aun ganando teleaudiencia, pueda empezar su caída y pérdida feroz, por no haberse cuidado estos detalles.
Igualmente sobresalió la furia del “Abelardito” juez Jordi, indignado sin motivos con el entusiasta, respetuoso y “correcto” José David, quien fue muy frontal y digno durante el comentario de su prueba de eliminación, pero eso no bastó al triunvirato que prefirió “cargarse” al tecnicista y esmerado joven, también cinco veces nominado (aunque en cuatro ocasiones inmune y dos favorecido), que a la “alquimista”, pero “nada pulcra” Eva, quien en su primera “presión” (o depresión) demostró no estar a la altura; y si es cierto que ella había ganado otros retos con antelación, también José David se merecía estar en la final, pues al que “impusieron” los jurados fue a Fabián en el descarte anterior, ganado realmente por el valenciano; cuando en verdad ya no había remedio, puesto que lo que deseaban evitar a toda costa era el contraste conclusivo entre el ingenuo muchachito mayorquino y la habilidosa bióloga cordobesa, del cual claramente saldría victoriosa la cuatro veces favorita, una salvada y otras cuatro inmune, por sobre el nunca favorecido, cinco veces nominado y siete inmune, quizás por el ser el más joven de la competencia o el menos hábil ciertamente.
Por su lado, otra opinión interesante aparece en los blogs de El Telescopio Digital, digna de tomarse en cuenta, pues se aviene igualmente a lo que pensamos:
“Fabián, sorprendentemente, cuajó el mejor postre. ‘Ya era hora de que me saliera un plato bien’ dijo tras elaborar una tarta de un 12 que le dio Lola Herrera y dejar fuera de combate a sus dos contrincantes. El jurado lo tuvo claro y regaló a Fabián el pase a la final desatando una marea de especulaciones e indignación por parte de los tuiteros. ¿Cómo es posible que un concursante que solo hace bien un miserable plato llegue a la final? Ustedes juzgan”.
Sobre Juan Manuel, el primer finalista, no hay que agregar mucho, debido a que ha sido, desde el principio, el perfilado por el jurado y la producción, como el mejor candidato para ganarse esta prueba del primer MasterChef ibérico, y por supuesto que no importa lo que digamos, pero ya la moneda está echada con el tres veces favorito, una salvado, cuatro inmune y otras tantas nominado; de modo que no tenemos que esperar al último programa para darnos cuenta de su final previsible y del saldo total de la primera temporada de esta competencia gastronómica televisiva.
Mientras terminábamos nuestro artículo, nos topamos con este otro comentario del mismo blog citado, a cargo de Miss Fondant, que bajo el título de “Los finalistas de Masterchef son de vergüenza” agrega aspectos de interés para este análisis:
“En el programa de anoche se suponía que habría tres pruebas de presión en las que el mejor de cada prueba se salvaría y se convertiría en finalista pues bien una vez más, algo ya bastante habitual en el programa, fue solo en teoría, porque ya se encargarían los jueces de que a pesar de las más que claras evidencias de lo contrario, que ganara el que al jurado le daba la GANA, por supuesto sin ser el mejor. LAMENTABLE Y VERGONZOSO!!!!
Las tres pruebas:
En la primera gana José Manuel, un chico más que cortito que podrá ser cocinero de un chiringuito de playa en el que la comida podrá estar rica, pero que le falta muchísimo de creatividad, técnica y talento. Su mayor baza dar Pena y que la gente confunda la mediocridad con la humildad. Un personaje que ha estado caracterizado por la envidia hacia un José David sin duda muchiiiiíssiiimo más preparado. Aquí en España gusta mucho el...es peor pero qué penilla da, venga, pues a la final. Qué asco, así va España.
En la segunda prueba salvo un ciego (no mayor ciego que el que no quiere ver) fue clarísimamente superior José David, trabajo limpio, organizado, concentrado y SIN AYUDA. Algo a lo que otros concursantes están más que acostumbrados véase Fabián, un chaval que siempre está desbordado, atacado que tiene una malísima organización y que por supuesto solo hizo bien el postre, su única baza, esta y ser un pimpollo, nada más.
En dicha prueba se ve claramente como a José David le sacan la tarta del horno, como Eva desenchufa lo que José David está usando y es que Eva perdió absolutamente los papeles porque era evidente que José David la había superado limpiamente y con creces...esto es innegable por más que caiga bien o mal. Esto no es miss simpatía sino se suponía un concurso de cocina, aunque por desgracia ayer comprobé que no era tal cosa.
El jurado de artistas que iban a valorar los platos quedaron fascinados por José David. No entiendo salvo por manipular la decisión del jurado que a estos artistas se les diga desde el propio quien les va a cocinar cuando siempre se había hecho de forma anónima para no favorecer a unos sobre otros y fomentar el amiguismo pues ayer Samanta lo hizo...QUE CASUALIDAD!!! y a pesar de dicha información José David fue muy superior a los demás, en el montaje como siempre se intentó que esto pasara inadvertido pero se dé buena fuente que quedaron encantados con José David.
De esta prueba salió Fabián algo que a todos pillo por sorpresa ya que NO LO MERECÍA y el jurado tuvo que aludir a la "humildad" porque no había nada más y esto también seria discutible.
A pesar de lo abrumador de la INJUSTICIA, una más contra José David,( al que para mí han convertido en victima por el trato siempre despectivo al que ha estado sometido y a pesar de lo que le han hecho pasar a seguido aguantando y luchando contra un jurado injusto y compañeros envidiosos) a todas luces TREMENDO EL TONGAZO, el niño Fabián solo por favoritismo se coló en la final. Aquí vimos a la impresentable de la presentadora como se alegraba de forma desmedida. Imagino que se identificaba de ser colocada a dedo...porque qué vergüenza de presentadora con la cantidad de gente valida que espera su oportunidad.
Ayer vimos un poco más, también, de la verdadera cara de Eva, boicoteando ( queriendo o sin querer, a José David y viéndola cocinar aturullada y sucia como nadie. Ya en su momento junto con Clara vimos como ellas se salvaban las primeritas en lugar de apechugar como capitanas y asumir responsabilidad es. Eso que ellas "no eran competitivas". Venga ya...!!!
En la tercera prueba, salió Eva con un plato incomible, mezcla alocada y desbordada pero ahí está en la final...y me pregunto para que hacer el paripé de las pruebas si ya sabíamos de antemano quien iba a salir siendo muchísimo peor cocineros? y la respuesta es una vez más la mediocridad.
El plato de José David estaba rico y con una salsa especialmente rica (eso reconoció el jurado) pero no le sirvió de nada. Ya lo sabíamos...
A este chico se la ha echado la fama de sobrado y ha dado igual todo lo que haya hecho y demostrado, sobretodo, da igual que sea cien mil veces mejor cocinero que los demás...porque no ha jugado la baza de PENA, LA MEDIOCRIDAD Y LA FALSEDAD.
José David ha hecho caso al jurado, y como le aconsejaban ha utilizado las técnicas de cocina más innovadoras y por ello ha sido criticado.
Ha creído en sí mismo como les aconsejaban a los concursantes desde el jurado y aquí también ha sido por ello duramente criticado.
También le han dicho que escuchara más al jurado y que dejara de hacer " al aroma de" y lo hizo y por ello le acusaron de que plato más sencillo para ti...
Y es que hiciera lo que hiciera lo iban a hacer caer porque la gente brillante, con conocimientos, con afán de logro, perfeccionista y exigente consigo mismo no tienen cabida en MASTERCHEf”.
Ciertamente que José David recaudó más “infames” que “fanes”, pero independientemente a eso es el más capaz, técnico y creativo de entre los quince concursantes que participaron en MasterChef, además de que tiene un loable camino por delante, junto a su honestidad, valentía, talento, ingenio con creactividad, y una verdadera familia, que puede ayudarlo a progresar, a pesar de los contratiempos y tropiezos por los que pasó, sin pasar por alto jamás los que le hicieron pasar.
Por lo que veo, en la final tendremos a una Eva, junto a la costilla de su mozalbete Adán (Fabián), con la serpiente enroscándose ya en su vanidad (Juan Manuel), a punto de devorar la “manzana de la discordia”, desde el paraíso-infierno de MasterChef.
Sin embargo, aunque parezca mentira, el verdadero triunfo no son el premio de 100.000 € en metálico, la publicación de un libro con sus propias recetas, o una matrícula en la prestigiosa escuela Le Cordon Bleu, de Madrid, que cualquiera de los tres podría obtener, sino exhibir una entereza inquebrantable y una personalidad auténtica, como la demostrada por José David, durante su última conversación con los jueces de marras: la oportunidad de mostrar sus fortalezas y virtudes, frente a tanta adversidad, en medio de un ambiente deshonesto, tendencioso y hostil.
Prueba de que ningún chef amateur será profeta en su tierra televisiva, o mejor, en la cocina movediza del MasterChef español.
José Antonio Gutiérrez Caballero
Josan Caballero
25 de junio del 2013.
Bibliografia consultada:
http://es.wikipedia.org/wiki/MasterChef_(Espa%C3%B1a)
https://www.verema.com/foros/restaurantes/temas/1095559-jose-david-kurtko-verema-eliminado-masterchef
http://www.eltelescopiodigital.com/index.php/es/interferencias/16873-masterchef-semifinal-expulsion-de-jose-david-eva-juan-manuel-y-fabian-finalistas.html