Segunda reunión en BCN

El pasado sábado día 26 se celebró la segunda reunión del grupo de cata en Barcelona aun por bautizar de forma definitiva (aunque se va concretando el asunto). El ambiente no podía ser mejor. Como lugar de reunión esta vez escogimos La Cave, una vinoteca realmente dinámica, dónde su personalísimo sumiller, Claude, nos dirigió y amenizó una cata a ciegas de la que nada en absoluto sabíamos y que a continuación detallaremos. Los participantes a un nivel humano excepcional, exceptuando al que transcribe que ya lo conoceis y no os puede engañar. Estuvieron de nuevo los de la última reunión, es decir, Laura Prat (LPrat), Jose Luís (jose-luis), Dorothy, Rocío y un servidor. A nosotros se unieron tres monstruos (por su pasión, claro) del vino como Joseph Bel (JosepB), Damiá (DamianAmoTutusaus) y Lluis (Llpablo). Pues como veis tenemos el embrión de lo que promete muchas reuniones terriblemente divertidas y apasionadas sobre vino. La pasada lo fue, sin duda, llena de risas, de ilusiones, de sorpresas. Se pasó volando.

La cata fue organizada por Claude. Tenía un hilo conductor, que en principio no conocíamos y que al final resultó ser el tipo de vino así como el país de origen, Francia. Nos preparó una serie de fichas de cata que todos los participantes fuimos rellenando. Tras terminar esta actividad Claude pasó a hablarnos de los vinos y darnos una cura de humildad, como suele pasar en estas ocasiones. Tras tener el espíritu libre de orgullo pasamos a acompañar el vino que quedaba de unos platillos sencillos pero muy ricos que nos prepararon y seguimos con la charla. Cuando dimos finiquito al resto de los vinos de la cata, como teníamos cientos de botellas a mano, dispusimos aun de una más para terminar la comida y otra más con los postres. A continuación paso a describiros los vinos y después una somera descripción de la comida y postres.

Vinos de la cata (en el orden en que fueron servidos):

Dufouleur Père et Fils Morey-Saint-Denis 1999
Bourgogne, Francia.
100% pinot noir.
Vendimia manual, maceración en frío, fermentación en depósito abierto, crianza en barrica durante 12 meses.

Château La Croix Saint André 1999
Lalande de Pomerol
Bordeaux, Francia.
80% merlot, 10% cabernet franc, 10% cabernet sauvignon.
Vinificación por pago, crianza de 12 meses en barrica de roble, asemblage de los distintos pagos al momento de embotellado.

Primo Palatum Vin de Pays d’Oc Mitologia 1998
Languedoc-Roussillon, Francia.
85% syrah, 15% malbec.
Crianza de 12 meses en barrica de roble de un vino.

Esto en lo que se refiere a los vinos de la cata, tras la cual nos proporcionaron fichas a color de los vinos para que las contrastásemos con las nuestras, además de las explicaciones que Calude nos iba dando. El servicio fue en todo momento esmerado. Comimos varios platos, basados en elementos prácticamente no trasnformados, como ahumados, quesos variados, micuit, ensaladas, ibéricos y cosas de ese tipo. Todas aderezadas con un punto de gracia como aceites aromatizados, vinagres balsámicos, frutos secos, etc.

Mientras acabábamos con las viandas abrimos:

Gramona SAUVIGNON BLANC 2003.
Penedés.
100% Sauvignon Blanc. Suelo pizarroso.
Selección de los racimos. Llenado de barricas de Allier, nuevas donde el vino realizará la fermentación a 16º y la posterior crianza con sus lías. Tras cuatro o cinco meses en la barrica, en botella donde termina de redondearse.

Y para los postres:

Veuve Clicquot Ponsardin Rich Reserve 1996
Reims
Champagne, Francia.
59% Pinot noir, 33% chardonnay, 8% pinot meunier de 20 pagos distintos.
Método champenoise, dosificación de 32g/l (en la frontera del semi-seco), maduración mínima de 6 meses después de degüelle.

Este último estaba de escándalo, sin desmerecer a los demás. Había cuatro postres, perdón por no recordar los nombres exactos. Uno consistía en un bizcocho relleno de chocolate caliente, muy rico. Luego teníamos una tartaleta de peras y otra de higos, ambas de tirar de espaldas, junto a una tarta tatín también estupenda. Todas las tartas calientes y acompañadas de helado de vainilla.

Pues eso en lo que al plano material se refiere. En lo espiritual os lo podéis imaginar, ilusión, entusiasmo y alegría. El vino en su mejor estado.

Animaos los que aun queráis uniros al grupo, nuestra idea es llegar a diez o doce miembros y reunirnos los sábados por la tarde cada tres semanas. Aun nos quedan muchas cosas por decidir.

Un saludo.
Jose Ángel (grupo de cata no bautizado de BCN)