Sobre las fechas orientativas de consumo

24 respuestas
    #1
    OscarM

    Sobre las fechas orientativas de consumo

    Hola a todos,

    Las puntuaciones que conceden ciertos ";gurús"; a los vinos son siempre muy comentadas en este y otros foros, y la objetividad y ";fines"; detrás de estas puntuaciones son siempre motivo de encendida polémica. La actitud más acertada al respecto es probablemente dejarse llevar únicamente por los gustos propios, catando todo lo posible y aprendiendo de ello; o en todo caso, intentar descubir si el gusto propio parece coincidir bastante con el de algún crítico concreto.

    Alguno de estos ";gurús"; complementan sus puntuaciones y notas de cata con una banda de consumo preferente del vino (anticipated maturity).

    Os planteo esta cuestión que no recuerdo haber visto tratada en el foro: ¿Cuál es vuestra opinión al respecto?¿Son fiables estas estimaciones?¿Creeis que suelen corresponderse a la realidad?¿Teneis ejemplos de casos en los que se cumplen o por el contrario en los que consideráis que hay razones para pensar que son erróneas?

    Me lo pregunto porque así como veo qué grado de influencia en las decisiones de los consumidores puede tener una nota (y hemos comprobado el efecto en la propulsión del precio de algunos caldos), no soy capaz de detectar que el período de consumo que se estime tenga similar influencia ¿o sí?

    Además, el ratificar o descalificar una nota, tiene sencilla solución: catar y valorar con criterios propios el vino en cuestión.
    Pero: ¿Que hacemos con la estimación de períodos de consumo? (no es algo comprobable de inmediato).

    En fin, disculpad que me haya extendido tanto ¿Qué opinais?

    Un saludo,

    OscarM

    #2
    PedroBarrera
    en respuesta a OscarM

    Re: Sobre las fechas orientativas de consumo

    Ver mensaje de OscarM

    Mi opinión es que precisamente ese dato es muy valioso para conocer la experiencia real y la intuición natural de un gurú, crítico. aficionado, elaborador, enólogo, etc...

    El problema es la comprobación de esas predicciones, hace falta tiempo y medios. Pero si se consigue con más o menos precisión acertar en las previsiones en repetidas ocasiones, y descartando el acierto aleatorio, podemos estar ante una persona que ha nacido para esto.

    Saludos.
    Pedro.

    #3
    THuRStoN
    en respuesta a OscarM

    Pues imagínate, si algunos no damos crédito a sus puntos...

    Ver mensaje de OscarM

    En un tema tan peliagudo como la vida de un vino mucho menos aún.
    Reconozco, eso sí, que a las valoraciones genéricas sobre una cierta añada si que las suelo hacer cierto caso. Eso sí, tras contrastar varias opiniones entre sí.

    Pero para la vida de una botella de un vino en concreto no me fío para nada. Si tuviera que enjuiciar, primero el factor añada, después tipo de vino, región y variedades, por último y muy importante: procedencia de la botella, y después conservación.

    La verdad es que es un tema muy peliagudo y uno nunca puede estar 100% seguro de que le espera dentro.

    Te voy a poner un ejemplo, Monte Real Gran Reserva 1973, nota de cata en Verema: https://www.verema.com/comunidad/vinoscatados/vino.asp?vino=5365

    Leyendo la cata anterior, mucho me temía yo que estaba guardando un vino moribundo en mi bodega. Con esos antecedentes estaba ya preparado para lo peor, porque mi botella estaba comprada en un supermercado, y había conservada a temperatura ambiente (15º a 22ºC) con cambios típicos de por acá. Pues sorprendentemente el vino salió en muy buen estado. Así que, yo pocas veces me atrevo a aventurar nada de nada.

    THuRStoN^Peña Bilbao

    #4
    MCamblor
    en respuesta a OscarM

    Crucial reflexión, Oscar

    Ver mensaje de OscarM

    Muy importante tema...

    Como llevo ciertos añitos en esto del vino (más de lo que le corresponderían a un ";chico"; de mi edad, según piensan algunos), me he visto en la posición de leer una infinidad de esos estimados de consumo potencial y también en la posición de hacer tales proyecciones.

    Creo que todo depende de la confianza que uno tiene en el criterio de un ";gurú";. Y esa confianza debe basarse en la experiencia que es capaz de demostrar el individuo en cuestión y en sus ";aciertos"; del pasado.

    Si alguien lleva toda una vida bebiendo, por ejemplo, blancos de Graves";, es imaginable que, tras quince o veinte cosechas haya podido volver a re-probar algunas de sus primerillas y se haya dado cuenta de la manera que tiene el vino de evolucionar. No hay mejor manera para este individuo de lograr una perspectiva que probar juntos especímenes de un vino de una misma casa con un año, tres, cinco, diez, quince, veinte, cuarenta, etc. Asumiendo que las añadas que prueba fueron buenas, emerge una idea clara del tipo de evolución que puede esperarse de los jovencitos y, más importante aún, de los pasos que darán llegando a ella. Repetir tales experiencias constantemente y con distintos vinos amplifica el criterio del comentarista y lo hace más fiable.

    Ahora bien, fuera de todo este ";manual de instrucciones"; debo decir que esas proyecciones también tienen que ver con gustos. Por ejemplo, no es lo mismo una proyección de Château Haut-Brion hecha por un crítico francés que la hecha por un britáico chapado a la antigua, que la hecha, digamos, por el personal del Wine Spectator.

    En los tres casos puede haber suficiente experiencia, pero pueden influir elementos culturales como el tipo de vino joven que gusta al crítico, las asperezas que tolera en un vino que considera ";en su punto";, etc. En Francia se bebe el vino, por ejemplo, mucho más joven que como lo beben los ingleses de la vieja escuela. Aquellas historias del lord que heredaba la bodega de su padre y bebía lo comprado por su abuelo, preocupándose, a la vez, de que sus propios nietos tuviesen vino ";en su punto"; para beber, no son mentiras. Mucha evidencia he visto de su verdad. Pero esta manera de pensar corresponde a una cultura muy específica y a ciertos americanos, por ejemplo, probablemente no le cabría en la cabeza guardar vino de esa forma.

    Ahora bien, el tema es extenso y corre uno peligro de caer por la tangente... A tu pregunta sobre los gurús: En muchos casos me parece que fallan. Y por mucho. O son demasiado conservadores en sus estimados de longevidad de un burdeos, un gran rioja, un riesling alsaciano, un vouvray, una gran champaña, un borgoña importante, o son demasiado manirrotos con los años potenciales que otorgan chapapotes altamente inestables que, dada su falta de estructura, durarán ";lo que dura un merengue en la puerta de un colegio"; (para utilizar uno de los dichos cubanos favoritos de mi padre).

    Recientemente ví con consternación y risa (y porque me la enviaron de segunda mano, que a ninguno de esos trapos me suscribo), una reseña sobre Vouvrays de Huet, de la autoría del Sr. Rovani, segundo de a bordo en The Wine Advocate. Concluía sobre algunos semisecos y secos del 2002 en esta nobilísima casa del Loira, que tiene más de un siglo demostrando que hace vinos sumamente longevos, que eran vinos ";para beber en los próximos cinco años";. Claro, la hilaridad que me causara este comentario fue amplificada porque la noche anteriro había bebido un Le Haut Lieu Sec dle 69 que estaba en su apogeo...

    Creo que esas proyecciones, al final, son tan fiables como los puntos. Yo no me las trago y tiendo a nunca guardar nada que no haya probado. Los precios de la propiedad en Manhattan me han enseñado que el espacio hay que aprovecharlo muy bien y, aunque una botella de vino (o las seis que considero el mínimo que debe uno guardar de algo que merezca guardarse) ocupa poco, es algo que puedo destinar a otra cosa. También hay que hacerse siempre la difícil secuencia de preguntas: ";¿Quiero de verdad guardar esto?"; ";¿Por qué?"; ";¿Y si después me arrepiento?";

    Es por eso que siempre obro con cautela y la opinión final en la que confío es la mía propia.

    Bébase esta perorata entre el 2004 y el 2009.

    M.

    #5
    MCamblor
    en respuesta a PedroBarrera

    Cuando caen las máscaras...

    Ver mensaje de PedroBarrera

    ";...Ese dato es muy valioso para conocer la experiencia real y la intuición natural de un gurú";.

    Interesantísima observación, Pedro. Es por esas proyecciones, creo, más que por lo de los puntos, que se desenmascara a ciertos gurús y se sabe que mucho de lo uqe dicen es insustancial. Claro, tiene uno que tener mucho camino recorrido y el hígado de hierro colado para ser el desenmascarador...

    ";Tiempo y medios";: Un poco de astucia puede ayudarte a copensar por lo que te falte de cualquiera de los dos...

    M.

    #6
    MCamblor
    en respuesta a THuRStoN

    El paladar moderno...

    Ver mensaje de THuRStoN

    Alex,

    Actualmente creo que mucha gente sin suficiente experiencia en esto del vino tiende a dejar de lado los vinos sutiles, confundiendo lodelicado con lo moribundo. Es coo si lo único capaz de longevidad es lo que posee una capa cerrada y unos taninos hipertróficos. Y cuando un vino comienza a manifestar esos aromas secundarios o terciarios,o a suavizarse y perder angularidades, pues es de rigor comenzar a anunciar su muerte...

    Pero creo que, como Mark Twain, muchos de esos vinos de 30, 40, 50, 60 u 80 años pueden decir orondos que ";los rumores de mi deceso han sido muy exagerados";. Cientos de vinos he probado yo que, aunque no tengan ese cuerpazo que la mayoría de la crítica asocia (erróneamente) con la longevidad, van para largo. Lo que pasa es que su estructura y sus encantos se manifiestan de otra forma... Vamos, que no todo en el mundo tiene que ser Château Latour o Vega Sicilia para envejecer bellamente... Y si no pregúntaselo a lafite, Vieux Château Certan, a un gran Musigny o (porque a nivel de la plebe también los hay muy capaces) a un muscadet de Pierre Luneau con veinte años encima.

    El Monte Real 73 es, en efecto, un vino delicado. La añada dió eso en muchas casas. Quizás no viva tanto como sus hermanos mayores del 64, 62, 54, 52 ó 48, pero creo que seguirá dando placer durante una buena década.

    M.

    #7
    Podolski
    en respuesta a MCamblor

    Pues si....

    Ver mensaje de MCamblor

    Eso es precisamente lo que muchos nos preguntamos.... Pero tu Manolo, que ya has pasado por el mismo lugar en el que otros INTENTAMOS pasar, ¿qué recomiendas?. Considerando a como está el metro cuadrado de alquiler en Manhattan, como para no pensar en hacerte esa pregunta....(guardamos o no guardamos?). Joder llegar a ese punto cuesta un huevo y parte del otro.
    Sin duda confiar en uno mismo es algo que al fin y al cabo nadie podrá recriminarte....(te equivocaste: la jodiste tu solito...). El camino es duro y solitario..... Esto es la ";hostia";.

    #8
    MCamblor
    en respuesta a Podolski

    Sin dolor...

    Ver mensaje de Podolski

    Lamento decirte que no creo que haya una manera de aprender nada sin darse unos cuantos testarazos y acabar con unos cuantos moretones y la ropa sucia... Los ";gurús";, como se dice en mi tierra, ";te embarcan"; a cada rato (eso quiere decir que te engañan, o ponen un huevo inmenso por le que tines que pagar tú). Y si lo haces tú solito, conifando en tu propio juicio y leyendo de todo menos esas proyecciones (tan frecuentemente estúpidas y hechas desde una ignorancia abyecta), pues, tendrás tus tropezones. Te dolerá. Pero sin dolor no hay progreso.

    Nuestro peor problema, como sociedad, es que queremos que nos lo den todo hecho, que aprender no nos cueste. Pero tengo que decirlo: Hay que joderse, porque cuesta. Hay un decir dominicano que me gusta mucho: ";Quien quiera mo)os bonitos, que aguante jalones";. No hay verdad mayor. El saber se adquiere viviendo y vivir, por lo general, es una secuencia larga de golpes, desilusiones, intentos de timo, pequeñas y grandes catástrofes sentimentales o pecuniarias, etc. Entre todo esto, de vez en cuando encontrarás un momento excelente que hace que te olvides del resto de la no-gozada. Si tienes suerte, sentirás, con ese momento, que después de todo, puede que el asunto valga la pena.

    Sorry. Me levanté de un humor muy chapapótico hoy, realista como el cuchillo del ladrón que te atraca a los cuatro de la mañana, cuando andas borracho por una calle de Madrid. Uno crece. Uno lee. Uno prueba cosas. Y solamente los coocimientos que guarda uno adentro después de haberlos cazado como si fueran alimento, cocinado como si fueran alimento (o ingerido crudos, si apremiaba la necesidad), digerido como si fueran alimentos y excretado y reabsorbido una multitud de veces nada alimentaria, son los que valen confianza.

    No hay atajos. Si te has dado cuenta que aprender de algo es una putada, debes evaluar tus prioridades e interrogar tu deseo. En algún momento tomé yo el examen nacional de admisión a escuela de derecho. Pensaba que, si no podía hacerme un ciudadano de provecho, al menos podría hacerme abogado... Ese examen, en EEUU, se llama el LSAT. Recuerdo que el día que fui a tomarlo se sentó al lado mío un chico puertorriqueño muy simpático. Antes del examen me confesó que ésa era la sexta vez que iba a tomarlo. Yo le pregunté si, tras haber reprobado cinco veces, no pensaba en darse por vencido y que lo de ser abogado no es para él";. Me desarmó con palabras muy simples: ";Ser abogado es bueno; yo quiero ser abogado, no importa cuantas veces tenga que hacer esto. Esta vez estudié mejor";.

    Tuve que admirar ese tipo de idiotez. O de fijación ideológica. O de coraje. O lo que fuese.

    Yo guardé Caymus Special Selection 90. Yo guardé aquel primer vino de Teófilo Reyes. Yo guardé shiraz de gama alta de Rosemount. Yo guardé chilenos ";chic";. Yo guardé muchas cosas que luego lamenté haber guardado. No creo que el espacio, el dinero, las expectativas y todo lo demás que eché por el sumidero de la cocina cuando abrí finalmente esos vinos se hayan perdido. Me jodí. Ahora puedo decírtelo con orgullo y recordarte, como ese consejo que ";si te vas a llevar alguno, llévate éste";, que hay que joderse.

    ┐Te sorprendería si te digo que esta mañana de sábado mi libro favorito uelve a ser La caída, de Camus?

    M.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar