Botellas de 50 centilitros: ¿un formato con futuro?

17 respuestas
    #1
    Juan Such

    Botellas de 50 centilitros: ¿un formato con futuro?

    Leo en noticias de prensa la presentación del nuevo formato de 50 cl. para el Dominio de Tares Cepas Viejas. En la nota se añade ";un tamaño pensado para el consumo individual o en pareja que, con toda probabilidad, gozará de la plena aceptación del consumidor";.

    Precisamente este sabado pasado en la visita a Bodegas Mustiguillo (ya hablaremos de esto en otro hilo) Toni Sarrión me comentaba que se había tomado el día anterior una botella de 50 cl. de Champagne y que le parecía el tamaño ideal para tomar en pareja o en solitario.

    Mario Rico (Dominio de Tares pero antes trabajó en Kodak) sabe un rato de cómo hacer marketing de calidad y esta presentación, junto con el comentario de Toni, me hacen pensar: ¿Vamos a ver muchas más botellas de 50 cl. en el futuro inmediato? ¿Se puede convertir en un formato de moda para los consumos domésticos? No sé si teneis experiencia consumiendo este formato. Yo no, a excepción de algunos vinos dulces.

    #2
    3931
    en respuesta a Juan Such

    Re: Botellas de 50 centilitros: ¿un formato con futuro?

    Ver mensaje de Juan Such

    No se si eso abaratará mucho el precio del producto final, porque tenemos por un lado la etiqueta y el tapón, que continuaran siendo un gasto fijo por botella, así como la botella, que no creo que sea mucho más barato una de 50 cl que una de 750cl, los precintos de la D.O.Q idem, la cápsula idem...lo único que llevará un tercio menos de vino, pero por otra parte los gastos de embotellar serán mayores pues deberán hacerse más botellas???ummm
    no se!!! pienso si esto no será al fin y al cabo una manera de acabar vendiendo a un precio un poquito más bajo, solo un poquito, MAS BOTELLAS, y como siempre el que puede salir perjudicado a la larga es el consumidor!!!

    #3
    MaJesus
    en respuesta a Juan Such

    Re: Botellas de 50 centilitros: ¿un formato con futuro?

    Ver mensaje de Juan Such

    Hombre, yo en casa no lo echo de menos (que el vacuvim funciona razonablemente bien), pero la verdad es que en restaurantes hay veces que soy la unica que quiere beber vino (que cosas, eh?), y en esos casos o tienen botellas pequenyas, o me tengo que pasar a la cerveza (por desgracia, lo del vino por copas, que lo encuentras en cualquier restaurante o bar gringo, aqui parece que no se lleva)

    MaJesus

    #4
    Juan Such
    en respuesta a 3931

    Re: Botellas de 50 centilitros: ¿un formato con futuro?

    Ver mensaje de 3931

    Ya, pero todo ese razonamiento se podría hacer igual para vender las botellas con capacidad de un litro y casi nadie lo hace (sólo conozco a algunos elaboradores alemanes de Riesling y para el mercado USA).

    La pregunta básica es: ¿Cual es el consumo normal de vino por persona en una cena/comida? ¿Les molesta a esa persona o pareja que sobre vino? Si la respuesta a la primera pregunta es unos 25 cl. por persona y la segunda es afirmativa este formato me parece una propuesta interesante a estudiar. Si el cliente está dispuesto a pagar el sobreprecio (como pasa con las botellitas de 37,5 cl. de fino o manzanilla) ¿por qué no ofrecerlo?

    #5
    Daniel P.Whitaker
    en respuesta a Juan Such

    Depende el mercado al que vaya dirigido

    Ver mensaje de Juan Such

    En Suiza, donde me encuentro desde hace poco más de un mes, he encontrado el mercado de vinos más competido que pudiera yo imaginar. Los precios son, en muchísimos casos, ridículamente bajos --lo cual es contra-intuitivo si consideramos la fama que tiene este país, de cobrarte hasta la risa.

    Pues bien, en casi todos los negocios que he visitado, he visto de botellas de 50 cl de chateaux de enorme prestigio: Ausone (¡Ausone!, que embotella menos de 2000 cajas al año), La Mission Haut Brion, Margaux, Palmer, L’Eglise Clinet, y un largo etcétera. Een todos, la respuesta de los vendedores ha sido la misma: se venden como pan caliente para la cena del día.

    En realidad, tiene todo el sentido del mundo: uno jamás compraría un Ausone 96 para esta noche (y yo, ni aunque tuviera la pasta para pagarlo), pero una media botella, que ya debe de estar completamente bebible, pues puede que haga el esfuerzo y pues la pagas.

    Si en España los bodegueros han identificado esta necesidad del mercado, tienen mucha plata que ganar. Si lo hacen bien.

    twitter.com/daniel_pw
    Al buen amigo, dale tu pan y dale tu vino

    #6
    Miguelbt
    en respuesta a Juan Such

    Re: Botellas de 50 centilitros: ¿un formato con futuro?

    Ver mensaje de Juan Such

    A mi personalmente me parece muy adecuado. Además, creo que existe un nicho de mercado para ese formato, tb considero que este formato puede ayudar a que reactivar el consumo del vino en el sector hostelero.
    ESo sí, considero que el precio será proporcionalmente más caro que la de 75.
    Salu2

    #8
    jose
    en respuesta a Juan Such

    Ah, no! y recontrano!

    Ver mensaje de Juan Such

    Para consumo en pareja (y más si es de champagne) el tamaño ideal es el de 75 cl. (pero si a veces tienes que buscar una segunda botella!!!) y para el onanismo enológico... pues también! Que si la botella no cae de un tirón (cosa normal) pues así ves como evoluciona.
    Bien, estoy hablando de consumo en casa, claro, pero ¿qué ocurre en restaurantes? De los márgenes a aplicar en restaurante, hablamos otro día, porque dudo muchísimo que la diferencia entre 50 y 75 cl. la vaya a notar el consumidor más que en unos limitados eurines, pero IMHO el ";problema"; seguirá siendo la falta de la expansión del modelo de ’vino por copas’ para aquellos casos en los que no todos los comensales quieran beber vino o quieras probar (o maridar) varios y distintos vinos durante la cena y también el modelo de ’Traete la botella’ (Bring Your Own, se le suele llamar por esos mundos sajones).
    Sigo pensando en que la unión de estos dos modelos de consumo, unidos al habitual ya conocido en los restaurantes, esto es, bodega propia con un determinado surtido/rotación y carta de vinos, no deberían ser excluyentes en todos los casos, si no complementarios y ayudarían tanto a los consumidores, como a los restauradores, a las bodegas, es decir, a toda la cadena; pero desde luego no creo que ese formato lo vaya a beneficiar en absoluto.

    Saludos,

    Jose

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