El libro está en la estela de las obras fundacionales de Simón de Rojas

El libro está en la estela de las obras fundacionales de Simón de Rojas Clemente, Boutelou, Diego Parada y Barreto, Henry Vizetelly e Isidro García del Barrio, o las varias contribuciones de Manuel Barbadillo. No pretende ser un fabuloso logro enciclopédico, como son las obras magnas del Marqués de Bonanza o de Julian Jeffs. Es más bien una especie de radiografía crítica de lo que ha sido Jerez y Montilla, qué es ahora (y ahí encaja perfectamente el exahustivo trabajo de Peter), y qué debiera aspirar a ser. Es decir, que no es simplemente un gran esfuerzo descriptivo, sino que es una propuesta aplastantemente razonada de por dónde debieran ir las cosas, entre otras cosas porque un brillante pasado muestra que lo que hay que hacer es totalmente factible. Por lo demás, el relate fluye como una seda, escondiendo elegantemente una erudición asombrosa. Me recuerda mucho al sobrio lenguaje científico de Simón de Rojas Clemente: hablar de cosas profundas con una gran economía de la lengua.

Mi aportación en todo eso es hacer de mosca cojonera de higos a brevas (que es lo que hacen los amigos), pero te puedo asegurar que el mérito, que es enorme, es al 100% suyo.