Claro que eres experto, Ricardo ;-) Efectivamente, unos años le vendrán de

Claro que eres experto, Ricardo ;-)

Efectivamente, unos años le vendrán de vicio para terminar de pulir los taninos e integrar todos esos amargores, astringencias y acidez con el alcohol. 

Es la grandísima diferencia entre un Gran Reserva y un Crianza o un vino más al uso con 8-10 meses de madera: estos vinos necesitan TIEMPO.

Tiempo en botella con buena conservación (12-15 años para plenitud de desarrollo), tiempo desde el descorche y servicio/decantación hasta sacar conclusiones.

Son vinos que, por su necesidad de reposo, paciencia y tiempo, no van en la onda actual del usuario medio que quiere todo rápido: la copa de "riojita" o "riberita" de barra y tapeo/chateo, jiji-jaja-jeje, para adentro, ponme otra, ponme otra tapa, cambio de vino,... 

Tampoco está en la onda de la nueva ola comercial de hace ya unos años de querer venderte la "última añada" del vino X: cuando, en lo personal, "la última añada" me importa un pimiento (ya la conseguiré si me interesa más adelante), me quieres colocar una caja de un crianza del 2015 o reserva del 2013 verde que te quiero verde para que le haga yo la guarda en casa... y un jamón!! jejeje :P

Esto es otro estilo, para dedicarle tiempo y olvidarnos del estrés y las prisas... lo que yo quiero en mi casa (para beber cualquier vino de consumo rápido ya tengo la calle y cualquier momento del día).