Siempre está listo para la mejor sensación, esta añada como la anterior, excelente sabor y despliegue aromático, fino de especias, caramelos, notas de tabaco y hojas, cedro y humo, boca con mucha materia, estructura y vigorosa presencia. Amplia y potente via retronasal. Muy bien.

Color picota oscuro con ribete anaranjado propio de su edad, muy cubierto. En nariz se muestra complejo al principio cuando se vierte en el decantador salen aromas de piña, tras 2 h en el decantador se muestra con aromas a tierra, cantos rodados, maderas nuevas, brea, tinta china y ligeramente balsámico. En boca entra fácilmente, muy redondo y persistente, quizás algo falto de retrogusto, vuelven a aparecer las notas de brea y tinta china, aparecen notas de regaliz, tostados, toffe, maderas nobles y nuevas, incluso a barniz, los taninos están perfectamente integrados y presenta una buena acidez que le auguran larga vida.

En plena forma, caminando pausada, pero firmemente hacia un bouquet terciario que no sé qué dará. Ahora su nariz aparece aún dominada por notas de fruta roja y negra, regaliz, minerales, tempranillo en estado puro. Es en boca donde asoman ya sin timidez esas notas a cueros finos, flores secas, animales limpios y nobles. Excelente acidez y estructura. Perfectamente pulido. Maduro. Más elegante y complejo que potente.
Creo que aún tiene cuerda para rato, va conformando su bouquet de noble reducción. Siento curiosidad por comprobar qué podría dar este rioja de corte "moderno" con diez, quince, veinte años de botella más. ¿llegará sin atisbos de declive? ¿Le dará lo suficiente para poder unirse con honor a la familia de los "clásicos" riojanos? ¿O puede que ofrezca otro pérfil de "nuevo vino clásico riojano"? Y, lo más importante de todo, ¿Viviré para verlo y saborearlo?

Ahora mismo está pasando por una fase de cerrazón. Muy cerrado en nariz, incluso algo reducido, apenas se consigue que exprese más allá de una limitada expresión frutal, algunas notas de reducción y suaves toques animales. En boca mejor, con cuerpo medio, buena acidez y buen recorrido. Excelente ensamblaje. Sabroso y consistente.

Vuelto a probar esta vez en casa y me reafirmo en mi cata anterior, pero le ha sentado bien el paso del tiempo y lo encuentro mas redondo.

Rojo cereza de capa alta. Nariz con atisbos de complejidad, hay notas de tabaco, rasgos fugases de cueros, hojarasca, humo, frutilla del bosque en confitura, balsámicos, algo de lácticos. Necesita más botella para desarrollar lo que lleva dentro, se percibe un estilo más tradicional de nariz en esta añada. En boca es amplio, con buenas dosis de frutilla silvestre, buenos taninos de madera nueva ( por ensamblarse ) y una buena estructura más actual y del estilo de los vinos modernos. Posgusto de frutilla roja muy vivo. Muy bueno, rico y en una fase de mejora en botella. Aún entero y con buena estructura, nariz con desarrollo y boca con ensamblaje por delante.

Se presenta vestido en un rojo rubí de buena capa, ribeteado en caldera.
En Nariz, se expresa contundente, fundamentalmente con fruta roja bien madura y balsámicos muy aromáticos, posteriormente se abre a tostados, curtidos y tabacos, sobre fondo especiado nítido y limpio. Algunos recuerdos de vainilla.
En Boca, se presenta noble, serio y directo, de recorrido bien equilibrado entre frutal y amaderado, redondo y bien estructurado y final elegante y aterciopelado.
RertoNasal eminentemente balsámica y afrutado.
Taninos nobles, bien pulidos e integrados.
Copa seca de tostados y tabaco fresco.
Buen recuerdo, de alargada persistencia.
Solo le baja algo la nota, el precio...
...Que aunque lo desconozco pòr haber sido catado en Restaurante, intuyo elevado!
Perfectamente decantado y servido, en temperatura y en copas Riedel, Pelgrí (Chiva, Valencia).

Bebido en restaurante, no tomé notas, pero ahí voy:
Color cereza oscuro, ligeramente turbio.
Aromas a frutos del bosque rojos, con fondo torrefactado.
En boca destaca la elegancia, vino redondo, sin aristas, como a mí me gustan!!
Excelente.

Color picota con menisco teja de buena capa.
Nariz de buena intensidad , amplia y fina de aromas a frutas rojas maduras (fresas, ciruelas, moras) minerales y cueros y notas balsamicas. En boca es suave y elegante muy bien estructurado, con cuerpo y taninos buenisimos y con final potente que sorprende.Largo. Muy bueno y con ganas de repetir.

!Por fin cato el 99!.
Color cereza muy oscuro con borde granate.
Aroma de intensidad media, pero elegante y complejo a buenos tostados de la madera (chocolate, café y cacao), frutos rojos y negros muy maduros (fresas, ciruelas, cerezas y uvas), toques balsámicos, minerales, vegetales y de cuero. Muy bien el abaníco aromático.
En boca tampoco es muy potente, pero tiene un paso de boca elegante, con muy buena estructura, bien equilibrado y redondo, taninos dulces y nobles, retronasal a todo lo que se observa en nariz. Final largo y persistente. No tiene la elegancia del 97, aunque este vino se caracteriza por esta cualidad, ni la potencias del 98, pero esta bastante bien. Cuesta sobre 35 €, el corcho un 8,5