Alucinante espumoso. Espectacular recuerdo de esta Navidad

Botella degollada el 23 del 11 con una crianza de más de 15 años y 7 meses, con una edición de 60 botellas proporcionada por Ferran del Celler de Gelida. La que nos bebimos era la 58. Presentado en una caja propia con el corcho de su crianza y un video del momento del degüelle. Una presentación espectacular, pero nada que ver con su seductora pureza e intensidad del que todos los que disfrutamos de sus matices todavía lo recordamos y añoramos. Un gran cava espectacular, amplio, austero y muy elegante. Color amarillo dorado brillante con una burbuja pequeña. En nariz aromas frescos con una intensidad muy agradable, con notas anisadas, herbáceas y notas balsámicas. Fruta madura y notas minerales. Va evolucionando muy bien. En boca llena la boca, es sorprendente, es amplio, vivo, fresco y una gran acidez. Muy largo y persistente. Seductor y elegante. Un cava cremoso y con una gran integración carbónica. Mineral y frutal. Sensacional, placentero, fino, equilibrado y creo que es el cava más espectacular que haya bebido. No solo dentro de los cavas, sino de los espumosos en general. Alucinante. Buen recuerdo de esta Navidad.