Ahora ya solo insulta.

Una de dos, o cada vez es mejor, o yo me voy acostumbrando más a él. Recuerdo que la primera vez me tiró para atrás. Hoy, vencidos aquellos puñetazos de alcohol, me encuentro con esta nueva añada que no ofrece nada de ello, pese a notarse, ojo.

Este casi tinto ofrece un guinda subido con orilla violácea y una estupenda lágrima.

Aroma a fruta roja madura, frambuesa, y también de hueso, melocotón muy maduro, goloso, con notas de sirope, todo sin abuso y sin empalagar.

Untuoso en boca, pero con una acidez medida, por lo que la confitura de frambuesa queda compensada, es potente, pero fresco. En definitiva, equilibrado, más que nunca. Y es que es la mejor y menos alcohólica de todas las añadas.

Recomendado por 1 usuario
  1. #1

    Arrutzi_Najera

    Aupa Oti, coincido contigo en la integración del alcohol en el vino, pese a los 14 y pico. Me gusta su alma hibrida de rosado y de tinto. Saludos.

  2. #2

    Juanjosantos

    En efecto.

    Lo que no entiendo es los 14.3% que veo en la ficha cuando en la contraetiqueta de mi botella aparecen 15% de volumen. ¿ El que subió la nota lo hizo de otra añada ? Porque en la 2012, al menos en mi botella son 15% de volumen alcohólico.

  3. #3

    Otilio Haro

    en respuesta a Juanjosantos
    Ver mensaje de Juanjosantos

    A lo mejor no. En alguna ocasión me he encontrado un vino que aún siendo la misma añada figuraba en la etiqueta una graduación distinta de medio grado.
    En el caso de éste, también mi botella contaba con los 15º.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar