Botella bordelesa-cilíndrica, hombros prácticamente en ángulo recto, boca y vidrio muy gruesos, etiquetita con forma de alas y lacito muy chic donde alberga las proporciones de uva e información de cata. Buen corcho sintético de color blanco hueso.
Visual: amarillo pálido-dorado, limpio, brillante y con poca lágrima.
Nariz: intensidad media-alta, frutas tropicales al inicio pero que desemboca tras un tiempo en copa en fruta blanca de hueso y melocotón en almíbar, flores, complejo. Buena nariz.
Boca: entrada fresca, sabrosa y golosa, un toque dulce ligero, apenas se percibe amargor durante el paso por boca, excelente acidez y estructura en el paso por boca. Final medio, no muy largo (esperaba que lo fuera más) con un toque final sutil a dulce de membrillo.
A precio normal la RCP me parece buena, al precio del lote verema rebajado (poco menos de 10 euros la botela) la veo muy buena.
Blanco doradillo, más similar al mosto que al vino.
En mariz sumamente frutal, con toques verdosos.
En boca goloso con un final algo escaso.
Recuerdos gratos a mosot suave, lo volveremos a probar.
Botella muy macarra.
Color amarillo pálido con destellos dorados.
La nariz es de media intensidad, bastante compleja, inicialmente predominio de la fruta tropical, tras aireación, flores blancas, recuerdos almibarados, notas vegetales y un punto mineral.
En boca tiene buena entrada, resulta fresco, muy buena acidez, paso elegante y frutal por boca y final de media longitud.
Es un vino aparentemente fresco y ligero pero no exento de estructura y sobre todo de una paleta aromática muy interesante y equilibrada. Para repetir.
A la vista se muestra con un color entre amarillo pálido y pajizo, algún destello verdoso, limpio y brillante.
En la fase de la nariz se muestra con una baja a media intensidad, con poca definición de lo que se aprecia, con algo de fruta de hueso y manzana.
Al paso por la boca, resulta fresco, con bastante acidez y un ligero amargor. Aquí me quedé.
Fase final de tipo longitud media e indefinida en detalles.
Botella bonita con diseño cilíndrico y un cartón en el cuello con diseño especial, con algún dato.
Tomado en casa con dos personas más, aficionadas a vinos blancos, una de ella miembro de un club de catas, que no les gustó tampoco y es más, no identificaron el albariño.
Bien la botella, aceptable la nariz y flojita la boca.
Así mismo al ver el precio, en mi modesta opinión, tiene mala relación calidad precio.
Lo primero que llama la atención es la original botella, con nota de cata en la etiqueta. Tanto la bodega como la denominación de sus vinos, le confieren un toque místico y llamativo que seguro consigue atraer el interés en las estanterías.
Color amarillo pálido, toque dorado, floral, frutas con hueso, y algo tropical. Se aprecia un toque ácido, y algo amargo al final, bastante original. Bien estructurado, ligero dulzor en el ataque, equilibrado al paladar.
buen descubrimiento, excelente elección del club!
Bella botella.
Color amarillo pálido.
Aroma muy intenso y cálido con fruta tropical, rosas y piel de limón.
Boca con cuerpo de media intensidad, ligero y fresco, paso de boca rápido, alta expresividad frutal y floral, con un ligero toque amargo, bastante corto.
Albariño liviano, muy agradable, ideal para platos ligeros, quizá gane consistencia con un poco de guarda.
Amarillo pajizo limpio y brillante.
Nariz fresca e intensa, en la que destaca sobremanera el plátano. También percibo mandarina madura, flor blanca y notas de salitre, de algas.
Untuoso en boca, de paso agradable, fresco, ligero, fácil. Mucha fruta tropcal en el paso y en la despedida.
Color amarillo pajizo pálido con reflejos verdosos, brillante.
Gran intensidad aromática, notas de fruta tropical madura como el mango y también melocotón, nariz golosa, con notas de flores blancas y de hierbas finas muy elegantes. Muy buena fragancia.
Su paso por boca es más ligero, suave, buena acidez, notas citricas, cierta untuosidad, pero menos golosa que la nariz, pero con la misma elegancia. Final amargoso agradable, aunque quizás lo he encontrado demasiado ligero en boca. Postgusto medio.
Empezando por la bonita botella, la decoración de la misma, la cápsula sencilla pero de bonito color, el corcho sintético bien decorado, menciona los varietales pero no da gran información.
Bonito color amarillo, limpio y brillante.nariz un poco corta pero sugerente: fruta y hierba recién cortada.
Rico en boca, equilibrado, bien estructurado y con un punto amargo muy de mi gusto.
Acompañó muy bien un plato variado de quesos.
Agradó a 3 personas muy diferentes en sus gustos y conocimientos enológicos, lo que me da a entender que es un todoterreno y un vino para disfrutar.
Buen posgusto.
Pajizo con reflejos ligeramente dorados.
Nariz de buena intensidad con aromas de fruta tropical, flores blancas, notas ligeramente herbáceas, flor del geranio y un punto ligeramente dulce como de membrillo fresco.
En boca tiene una buena acidez, notas ligeramente amargosas, buen peso de fruta y largo recorrido. Es un vino fresco y aromático, de fácil maridaje y fácil e beber, sin renunciar a cierta complejidad.
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