Rojo terroso no muy oscuro con ribete prácticamente transparente. Capa media-baja. No muy limpio y con brillo. Lágrima densa y desordenada. Corcho esponjoso.
Al principio los aromas están a medio camino entre las violetas y los tonos animales. Con aire el vino termina por abrirse, y observamos flores pasadas casi marchitas, cerezas rojas, bosque umbrío, algo de madera vieja, humo y mineralidad.
En boca se muestra delineado, punzante y con una acidez portentosa. El paso es fino, alcohólico y tánico. Sabores a violetas, tierra mojada, hongos, caza y tabaco.
Final de buena intensidad, con apuntes frutales, licorosos, balsámicos y minerales.
Un Gevrey de categoría, de una añada, la 2008, fría. En copa se comporta muy dignamente: expresivo desde el primer momento, va evolucionando en copa tornándandose más misterioso y profundo, hasta que al final alcanza un nivel redondo y asentado. Por unos 35€ creo que es un vinazo.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.