Otro buen vino de Marco Real, bastante sorprendente ya que es un 2009 y sin embargo está lleno de viveza y juventud.
Botella bordelesa, tapón de rosca, etiqueta muy sencilla y contraetiqueta con información de varietal, nota de cata y literatura florida.
Bonito color rosa fresa oscuro, limpio y brillante, nariz intensa a fresa ácida y fruta roja madura.
En boca es sabroso y fresco, con su punto de personalidad y correcto posgusto.
Muy buena acidez.
Deduzco que la longevidad de estos rosados es grande, dudo que muchos rosados españoles de esta añada estén tan ricos y, sobre todo, tan vivos.