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Abierto con una hora de antelación, sin decantación previa. Cada vez que abro una botella de este vino, me enamora más. Hace unas semanas degusté una botella del 2005 y otra del 2006, todavía el miércoles en una cena de veremeros se abrió otra botella del 2005 y una del Selecció Especial 2008 (merece un capítulo aparte). Sin duda una bodega que en cada añada se va superando a sí misma, presenta un cereza picota, de capa alta, ribete violáceo, lagrima abundante y lenta que tinta la copa.

La nariz de muy buena intensidad, no precisa de mucha aireación, todo a que con los minutos van variando las notas y ganando en complejidad. Inicialmente predomina ligeramente las notas provenientes de la barrica, con la aireación, aparece la fruta negra en sazón, especiados, vainillas, algo de cacao, caramelo de café con leche, ojo Antoliano, aparece la famosa “cremosidad del roble”, otras lácticas como la nata y alguna nota mineral de fondo.

Si la nariz impresiona, la boca no se queda atrás, ataque potente y a la vez elegante, muy buena acidez, taninos bastante pulidos, carnoso, se pega a las papilas, dejando un muy ligero amargor en el final de la boca. Retrogusto especiado y tostado y postgusto medio – largo.

Veremos si soy capaz de guardar alguna botella durante algunos años y ver su evolución.

PD: Para el tuerto, queda media botella para disfrutar mañana…….