Vino color picota intenso con tonos violáceos. En nariz es puro despliegue de fruta madura (ciruela, moras, uvas pasificadas) y mermeladas. En boca es suave, frutal, demasiado frutal para mi gusto, ligero en suma, pero con un recorrido mineral (terroso) y una acidez suficiente que alcanzan a equilibrar el conjunto inicial un tanto flojo. Final persistente. No es mi tipo de vino Malbec, pero puede gustar a más de uno en busca de vinos sencillos para acompañar un asado o bife argentino.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar