Esto es un Barolo de verdad

Rojo rubí, ribetes cobrizos, capa media.

Nariz de media intensidad, tremendamente elegante, de esas que no parece decir mucho, pero que te va proporcionando capa tras capa una complejidad asombrosa. Tenues notas florales, de frutas maduras licorosas, ciruelas, moras, toques de hierbas aromáticas y balsámicas, recuerdos especiados de clavo y nuez moscada, algunas trazas térreas, fúngicas y minerales además de un cierto tono animal, de cueros y tabaco de pipa. Elegancia absoluta y encantadora. Nariz para recrearse.

En boca es igualmente fino y sutil y está definido por su excelente acidez que no denota para nada el paso del tiempo. Vino sabroso y equilibrado, de paso elegante y redondo, con un final delicado tras el que nos deja sensaciones frutales, especiadas y térreas con unos taninos ya perfectamente pulidos en un conjunto realmente encantador. Buena persistencia. Con recorrido todavía en botella.

Un vino encantador, un Barolo clásico y maduro, de excelente añada y que está en un momento de consumo ideal ofreciendo un enorme equilibrio entre las notas primarias y las terciarias que denotan el paso del tiempo. Incluso pensamos que tiene cuerda para rato y un posible recorrido en botella, pero será difícil resistirse a sus encantos. Portentoso. Por poco más de 70 euros es toda una joya que no hay que perderse.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar