Para disfrutar de la juventud

Un vino joven que llega a la nariz con frescura, traje "casual" y cierto desparpajo. Aunque algo tímido aún. Gominolas, regaliz y flores. Se asoma, pero no se muestra del todo.

En boca pasa con alegría, motivando las papilas gustativas y dejando algo de tanino de uva muy ligero. Es frutal, jovial, como una feria de pueblo llena de atracciones: música, color y diversión.

Es un vino que se deja beber, es fácil, para iniciados y para disfrutar fresquito. Un caramelo que apetece beber y seguir con otra copa. No es excesivamente largo, pero deja sensación agradable y las papilas abiertas pidiendo más. Está recién embotellado, por lo que mirando más profundamente vemos algunos verdores, que no molestan en exceso. No presenta reducción en nariz, pese a que se acaba de embotellar.

Maridaje: pienso que vendrá al pelo para ensaladas variadas, y creo que a platos con algo de vinagre (de difícil "casamiento" con el vino). Quizá también algún plato de tomate ligero, tipo pisto.

Presentación: la veo sencilla. Etiqueta blanca y el perfil de unas botellas dibujadas y superpuestas en un lateral. El nombre de Higueruela no es excesívamente comercial, pero poco se puede hacer en este caso. Yo preferiría quizá una etiqueta más atrevida, que muestre mejor lo que el catador/bebedor se va a encontrar dentro.

Información ajustada en la contra. Con nota de cata. Bien por indicar la temperatura de consumo (12º-14º). Es un auténtico refresco de verano.