Evolucionando con el paso del tiempo

8€
Requiere oxigenación para que el vino se muestre equilibrado.
Muestra un color cereza de intensidad media-alta, borde granate, limpio, lágrima densa y lenta.
En nariz es potente, muy aromático y complejo. Las notas frutales están presentes en forma de cerezas en licor y ligeros recuerdos a ciruelas pasas. Su estancia en botella nos lleva a aromas clásicos; cueros, tabaco, trufa, laca, sotobosque y hojarasca. Su crianza en roble deja detalles ligeramente torrefactos y recuerdos a maderas. Un toque mineral terroso remata la fase olfativa.
La boca se muestra madura, con una entrada ligeramente amable, paso fresco, con buena acidez, equilibrado, de medio cuerpo, tanino pulido, de trago largo, sencillísimo de beber, con suaves torrefactos y un final bueno con elegantes notas amargas.
Un vino muy cercano a nosotros que hemos tenido la suerte de ver evolucionar desde su salida al mercado en 2009. Sus inicios potentes, carnosos, muy tostados y torrefactos han dado paso a un vino que actualmente se muestra pulido, con muchas notas terciarias de reducción en botella, como un reserva clásico, con atisbos riojanos pero manteniendo su carácter terroso y maduro.
83

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar