Es curioso. Hace poco abrí un 2001 y estaba joven todavía, un 1995 pletórico y un 1989 espectacular (mejor el 89 que el 95 en mi opinión).
Cómo cambian estos vinos de una añada a otra y de una botella a otra.
En cualquier caso, me alegro lo disfrutaras.
Cuando abro uno de éstos es una fiesta y lo suelo abrir 2-3 horas antes aunque lo vaya catando desde que lo abro para ver la evolución (normalmente de menos a más).
Un abrazo