Rojo picota con menísco burdeos y lágrima tintada ligeramente, ancha y oleosa.
De nariz media a picotas, moras y fresas bien maduradas con toques de violetas y aderezadas con especias dulces. Tostados de la barrica bien integrados, fondo de tomillo y Apuntes de chocolate negro y mentolados.
En boca es de ataque amable con recuerdos de fruta fresca , cacao y regaliz. Su paso es fresco, y de cuerpo medio. Se aprecian matices terrosos y de monte bajo. Sus taninos son vivos pero sabrosos y su acidez bien conjuntada. Final con recuerdos de chocolate negro con retrogusto algo corto.

Tiene esa belleza de la picota, es verdad, capa dura de ciruela y profética; tiene el fuerte toque de frutas rojas y tostados, caramelo de licor, la contundencia del suelo (pizarras) dando esa nota mineral muy elegante, con toques de mentolados y los fondos florales, la boca ancha, tánicamente sensible, suave, con caracter. Un vino muy agradable en boca con un final ligeramente recordando a la hojarasca. Es atractivo, muy goloso. Buena relacion calidad-precio que supongo lo hará muy interesante. Una buena apuesta otra vez por la bodega de Alejandro Luna, por este vino hijo de una añada muy buena, buenísma, en el Bierzo, en fin, ha sido una buena noche con el Beberide. (12 meses barrica)

Curiosa esta botella ya que la contraetiqueta viene integramente en ingles.
Fase visual: bonito tono rubi con mucho brillo,ribete violaceo y abundante lagrima.
En nariz se muestra muy frutal de intensidad media,con notas minerales y cacao.
El paso por boca es largo,con buena acidez y taninos maduros,se vuelve a mostrar la fruta roja muy golosa y ciertas notas minerales.
Un vino que deseas que no se acabe, sin duda el mejor bierzo probado este año.