La insoportable levedad del ser...

Después de media docena de botellas me ha atrevo a escribir estas lineas confesando que no consigo entender este vino... he oído y leído mucho sobre su filosofía, pero pese a todo me sigue desconcertando. Amarillo pajizo con destellos verdosos, presenta una nariz de media intensidad, muy ligera, en la que destacan algunos recuerdos propios de los vinos de crianza biológica, algunos matices entre herbáceos y vegetales y un toquecito que me recordó al aceite de girasol. En boca más expresivo y voluminoso, con alguna sensación grasa pese a su paso ligero, los amargos justos, buena acidez, bastante longitud. ¿Con qué tomarlo? ¿Cuál es su temperatura óptima de servicio? ¿Y la copa ideal? Me queda una botella... que esperará unos meses .... también espero la segunda entrega a ver si presenta características distintas....