Tempranillo de buena raza

... Bueno, lo prometido es deuda y una vez que he podido hacer la cata de este estupendo vino la pongo para que todos podáis conocerlo mejor, por supuesto, siempre a través de mi humilde opinión.
Vista: Brillante, limpio, de color rojo picota con ribete granate, ligeramente ambarino, con evidentes indicios de evolución. Su capa es alta y la lágrima densa que en su movimiento por la copa apenas deja color.
Nariz: Desde el principio es muy aromático, franco, con buena intensidad, con sutil predominio de los recuerdos balámicos, especiados (canela), torrefactos, pero que envuelven a una fruta roja y negra madura que ya nos llega algo macerada. Según se airea la copa, aparecen nuevos registros y el regaliz, la pimineta y hasta algunos toques de flores malvas, van sucediéndose en contínuas y diferentes oleadas.
Boca: Tiene buena entrada, con densidad, de amplitud considerable, sabroso, bien afrutado, equilibrado, sin aristas, placentero, con los taninos maduros, dulces, correcta acidez y final de boca largo y balsámico.

Un vino que ahora está en un momento de consumo ideal para los que prefieren la sutileza y la elegancia de la fuerza y vigorosidad que ya ha sido dominada, pero sin renunciar al sabor y la expresividad. Un vino que yo no dejaría para mañana.
Su precio que normalmente ronda los 18 euros, ahora es posible encontrarlo mucho más barato.