Para empezar

Fue una cosecha larga precedida de un clima bastante continental, con invierno muy duro y un clima bastante caluroso en el verano. El vino aparece bastante limpio, con un color atejado leve. A copa parada presenta buena intensidad olfativa, con ligeros aromas reductivos. Entre ello se adivinan frutos secos, toques de café, aromas de fruta en licor. No es particularmente compleja ni intensa. En boca la entrada es bastante suave, con ligera acidez y algo amargoso en su paso final, demostrando la presencia viva de ese tanino poderoso. Poco a poco fue escondiéndose en la cata y quedando por detrás de otros vinos de cosechas anteriores.

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