El Montsant más caro y seguramente el mejor, pero a un precio desorbitado

Bonito color rojo rubí de intensidad media con ribetes violaceos que denotan juventud, pero muy diferente a los vinos predominantes de la zona.

Aroma de intensidad media, muy afrutada, algo punzante. Se nota algo el alcohol pero no emmascara la elevada carga frutal (grosellas, fresones) bien conjuntada con la madera (nuez de coco) y las notas balsámicas y florales. Cuando el vino se va abriendo aparecen notas algo herbáceas.

En boca tiene un ataque muy suave. Se vuelve a notar algo el alcohol que no acaba de ser equilibrado por una acidez algo justa y un tanino, que se muestra algo verde, no del todo maduro.

Precedido de una gran añada como la 2004 encumbrada por la crítica, este 2005 no llega a cumplir todas las expectativas. Aun así, catarlo es todo un privilegio, por la corta producción y por el precio.