.-Fae visual: color ámbar con reflejos de oro viejo. Esperaba más peso en la copa al ser un vino dulce... Por supuesto esta sensación será por mi falta de experiencia con estos vinos ya que es mi primer Vin Santo. Forma lágrima de media densidad pero no da aspecto parece especialmente denso al moverlo. Limio y brilante.
.-fase olfativa: notas de la larga crianza y de levaduras que dan aromas a frutos secos (almendra). Notas de orejones de albaricoque, caramelo y toques amielados. A copa movida resaltan la notas de caramelo y fruta.
.-Fase gustativa: buena acidez que lo aligera bastante al tacto en la boca. Notas almendradas, albaricoque, miel, cera... bien equilibrado con persistencia bastante alta.

Creo que el maridaje no fue muy acertado... lo puse con una panna cotta y esa acidez del vino no casaba con el postre. De hecho lo dejamos para después del postre y, acompañando a unas tejas, sí que dio la talla. Hubiese estado muy bien para acompañar los Pañuelos de la Candelaria (unos crepes dulces que, en mi casa, se preparan y consumen el día de la Candelaria, 2 de febrero).
Mi nota sobre RCP, probablemete, esté sesgada ya que este vino lo compré de oferta por unos 6€.

Color ambar oscuro con reflejos de oro viejo. En nariz notas de albaricoque y caramelo. En boca muestra una moderada densidad, albaricoque, miel y tímidas notas de almendra y tostados y una acidez que equilibra muy bien el conjunto de sabores.