De lo más original que hemos catado en champagne

Color oro viejo, burbuja pequeña y escasa.

Nariz muy intensa, brutalmente compleja, misteriosa y cambiante. Al principio ofrece unas reducciones con algún aroma animal, pero va abriendo rápidamente en copa mostrando notas de flor seca, miel, toques herbáceos, balsámicos, especiados, frutas muy maduras, orejones, terrosos y fúngicos, en fin, una nariz única en champagne, algo muy especial.

En boca está increíblemente vivo y coleando, posee todavía un estructurado esqueleto ácido, es sabroso y mantiene un nervio sorprendente, con un paso redondo y un final largo y persistente, que nos deja unas notas finales de frutas maduras y frutos secos. La redondez y el equilibrio de esta botella es sublime.

Este es un vino muy especial, mezcla de las añadas 75 y 76, en crianza en lías desde 1977. Como en todos los vinos de este estilo existe una variabilidad entre botellas, pero esta que nos tocó salió especialmente buena. Y es algo totalmente único en Champagne, pocas cosas hemos probado como esta. Y se puede conseguir en torno a los 100 euros. ¡Sorprendente!