Precioso color rojo rubí intenso de ribetes rojizos y capa media. Nariz

Precioso color rojo rubí intenso de ribetes rojizos y capa media.

Nariz intensa, compleja, elegante y frutal que tras una mínima aireación se muestra espectacular. Destaca una preciosa y precisa fruta roja, unos elegantes toques especiados de canela, clavo, nuez moscada y pimienta negra, tierra mojada, recuerdos minerales, chocolates y café en grano. No se nota ni madera ni alcohol, la integración de aromas es perfecta. Maravilloso.

Pero esto no es nada comparado con el paso por boca. Es sencillamente perfecto, todo está en su sitio. Una marcada y vivaz acidez, un paso suave pero sabroso, un final largo y profundo y un posgusto frutal, especiado y mineral completan un conjunto de sensaciones únicas. Taninos de seda, perfectamente integrados en el conjunto. Gran persistencia. Se puede tomar ya, aunque mejorará con la guarda.

Cuando tomas un gran Borgoña como este se te olvidan los demás vinos. No existen otros tintos en el mundo que ofrezcan semejante redondez y expresión en boca y que sean tan placenteros. No es barato (76 euros), pero he probado decenas de vinos tintos de su precio o superior que no me han satisfecho ni la décima parte. Un vino para soñar.