Corcho que se parte al extraer con sacacorchos de dos tiempos, toca sacar la segunda parte con cuidado y quitar de la primera copa algunos trocitos de corcho. Por lo demás, huele muy bien.
Por circunstancias se descorchó y casi que se cató en muy poco tiempo (aunque luego le dimos como una hora en copa).
Visual: picota oscuro de capa alta, ribete cereza-atejado-transparente (en esta botella se ve el vino más evolucionado que en la disfrutada hace 6 meses), limpio en general (salvo algún poso al final de la botella), brillante y bonito, de abundante y excelente lágrima de lenta caída.
Nariz: de alta intensidad a fruta negra madura algo compotada ya, flores violetas, balsámico-mentolados potentes, especias, tostados, chocolate, café torrefacto, finas maderas, tinta china,... muy complejo, maduro, intenso y, sobre todo muy elegante.
Boca: ataque muy potente, de mucho peso, cuerpo alto, gran estructura, muy buena acidez todavía, mucha fruta negra madura, bastante volumen en el paso por boca y notable densidad. Se mastica la fruta negra, el chocolate y los granos de café... una pasada de paso por boca. Se nota fresco y, a pesar de su contundencia, es muy fácil de beber. El final es largo no, larguísimo con esa fruta negra amargosa-dulzona-compotada, esos chocolates y cacaos mentolados en un retrogusto descomunal; la retronasal no le va a la zaga y con notas de fruta negra, especiados, balsámico-mentolados, más cacao de retrogusto y finas maderas lo rematan maravillosamente bien.
Al menos esta botella la veo más evolucionada en visual, nariz y boca que la botella abierta hace 6 meses y, sin embargo, el vino está incluso mejor aún que el tomado entonces (aunque, como es lógico, en este caso, ya no le veo quizás tanta vida potencial como entonces, sigue teniendo aún como 4-5 años de vida en botella sin ningún problema).
Vinazo y excelente RCP.