Precioso color rubí de menisco ligeramente atejado y capa media-alta. No

Precioso color rubí de menisco ligeramente atejado y capa media-alta. No parece un vino con 16 años a sus espaldas.
En nariz es “perezoso”, le cuesta expresarse, pero tras una buena aireación y un tiempo en copa comienza el espectáculo: toques florales, fruta roja en compota, especias como clavo o pimienta negra, anisados, hinojo, recuerdos trufados, sotobosque, maderas viejas, humedades, cuero, tabaco de pipa. No para, es una máquina de matices una bomba de aromas. Absolutamente impresionante.
Y en boca es sencillamente apoteósico. De paso muy firme, alta y excelente acidez y un tanino marcado y presente, pero ya ligeramente domado con el tiempo en botella. Es larguísimo en el final y deja un fabuloso recuerdo amargoso en el paladar. Está ya en plenitud y creo que puede evolucionar otros 15 años más sin problemas.
Un vino fabuloso, de una gran añada y que está en su plenitud. De lo mejores tintos que he probado. Lastima que no queden más botellas. Para recordar por mucho tiempo.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar